El mundo de la medicina avanza casi tan deprisa como el mundo de la tecnología. De hecho, se acaba de hacer historia en este ámbito, ya que, por primera vez, se ha realizado una operación de reasignación de sexo totalmente completa y de una sola vez en tan solo 17 horas.
Este hito histórico ha sido llevado a cabo por el doctor César Noval, quien ha tenido que dirigir las tres cirugías que cubre la sanidad pública y que han sido necesarias para llevar a cabo el proceso. Pero no todo ha quedado ahí, sino que también se ha realizado una «masculinización facial», la cual normalmente se suele llevar a cabo por la sanidad privada.
Por normal general, esta operación forma parte de un proceso que, entre unas cosas y otras, puede llegar a durar hasta diez años. Es por eso que realizarlo en una sola sesión ha sido todo un éxito para el IMED de Valencia.
«La ventaja de hacerlo todo de una vez es que el paciente no se pasa varios años con la vida suspendida esperando», ha afirmado el Dr. Noval.
Para llevarlo a cabo, han tenido que seguir cuidadosamente una serie de pasos.
En primer lugar, se eligió la clínica Noval debido a que cuenta con una unidad de género, la cual abarca un departamento psicológico, endocrinológico y quirúrgico. Pero eso sí, desde la clínica aseguran que se debe estudiar cada caso de forma individual, consensuando posteriormente un tratamiento global que asegure la persistencia de la sensibilidad.
De este modo, hay que asegurarse previamente que el paciente haya vivido una experiencia real completa como hombre o mujer. Será a partir de ahí cuando se inicie el tratamiento farmacológico hormonal y se empiecen a plantear los tiempos de la cirugía.
Que el tiempo de operación sea tan reducido permite, tal y como han asegurado desde la clínica, una mejor recuperación postoperatoria y una mejor adaptación psicosocial tras la cirugía.
El siguiente paso y uno de los más importantes sería la cirugía facial.
Para someterse a la operación no hay tan solo que tener un buen colchón económico, debido a que la operación cuesta unos 20.000 euros, sino que también hay que contar con una red de apoyo (familiares, amigos…) que le acompañen durante el proceso para superarlo con éxito.
El problema de esta operación es que, al estar transferida la competencia de sanidad a la comunidad, hay algunas autonomías que no la tienen incluida en su sistema. Desde las asociaciones LGTBI del país aseguran que es importante que se legisle a escala nacional y se apruebe a Ley de Igualdad LGTBI, ya que, entre otras cosas, esto permitiría el acceso público y gratuito a este tipo de operaciones.