DJ Nano: "Mis amigos gays se lo pasan de la hostia en mis fiestas"

Temas: Entrevista, Música

Qué bien recibir a DJ Nano, uno de los artistas con más fandom de nuestro país, una mañana cualquiera en la redacción de Shangay. Enseguida le trasladamos este entusiasmo porque tal vez él, sus eventos y su target se asocian al paradigma de la heteronormatividad, pero su historia –y sus inicios en la escena electrónica– es mucho más diversa que cualquier prejuicio. “Entiendo lo que quieres decir. Pero tengo grupos de amigos muy amplios, entre los que hay gays, y se lo pasan de la hostia en mis fiestas. Gracias a Dios, creo que hoy en día somos mucho más abiertos. Hay mucha gente que no sabe que yo empecé pinchando como residente en WE, y eran unos montajes espectaculares nunca vistos en España. Viajé por todo el mundo de fiesta gay en fiesta gay, fue una época muy divertida”, recuerda. Y reconoce, como han hecho otros compañeros, la inmejorable atmósfera que se generaba: “La cara que se me quedaba a mí viendo aquel desparrame, en el buen sentido… Había un buen rollo que no encontrabas en una fiesta hetero”.

Tres años lleva inmerso en su última y gran locura, Popland, un evento que estrenará en Madrid el 9 de marzo, y que nace de la necesidad creativa del propio Nano, pero también para dar una vuelta de tuerca a todo lo que ofrece su industria en la actualidad. “Ahora mismo todo es muy parecido. Cuando hablas de las mejores canciones de la historia, mezclas todos los estilos. Y así va a ser, habrá un bloque rock, uno disco y uno de pop actual, aunque siempre con base electrónica y versionado por mí”.

Bajo el claim ‘Te las vas a cantar todas’, el madrileño presenta un show para todos los públicos y edades, donde recorrerá los temas más icónicos de la música pop, en compañía de La Fura dels Baus y de la orquesta electro-sinfónica Darevitam!, una fusión de artes escénicas nunca antes vista en nuestro país. “Y por fin voy a llegar al WiZink Center, el sitio donde siempre he ido a ver a los demás”, añade entusiasmado.

“No sé por qué no están muchos DJs LGTB en el circuito heterosexual. Aquí lo que importa es la música y el nivel del artista»

Después del éxito de su última creación, Oro Viejo, donde hace saltar a ritmo del coloquial remember a miles de personas, el madrileño se dará otro baño de masas con este auténtico homenaje a la cultura y a la música. Un repaso donde no faltarán iconos o divas como AC/DC, The Rolling Stones, Michael Jackson, Queen, Daft Punk, Avicii, Beyoncé y Rihanna, entre otros, enésima muestra de su versatilidad a los platos. “Leo entrevistas mías de hace quince años y siempre dije que era anti etiquetas. Si un DJ pinchaba house, no se podía salir de ahí… Me enfadaba mucho ese encasillamiento porque yo quería pinchar de todo, lo que me apeteciese en cada momento. Me supuso críticas en su día, pero al final, a la velocidad a la que va la música, mira…”.

Esa hiperactividad que irradia cuando se sube al escenario no cambiará. Así que su público fiel solo verá diferencias en el aspecto musical. “El fan de toda la vida compra las entradas el primer día, eso me sigue dejando con la boca abierta… No he contado ni lo que es y ya está ahí. Los que me conocen desde hace años saben que mi actitud no va a cambiar porque no sé hacerlo de otra manera”. Aun así, muestra empeño en que las diferencias entre Popland y Oro viejo queden bien explicadas: “Tenemos que comunicarlo muy bien, no es un evento fácil de explicar. En las redes sociales estamos limitados, y es muy difícil que la gente se pare a prestarte toda la atención».

Antes de continuar con compromisos empresariales –nos confiesa que esa faceta le apasiona tanto o más que pinchar–, y volviendo a recordar sus inicios en la escena gay, se extraña de que ese camino apenas se produzca a la inversa, y que entre los DJs más populares no haya referentes abiertamente LGTB. “Da la sensación que solo pueden pinchar en fiestas gays, no sé por qué no están en el circuito heterosexual. Aquí lo que importa es la música y el nivel del artista. Mira que no lo había pensado, pero es verdad que ocurre. Es una putada. Le tengo que dar una vuelta…”. Y se marcha reflexivo, dejando claro que en Popland sí respirará inclusividad. “Vendrá gente de todo tipo, y no hablo solo de condición sexual. Ya no se limita a una cosa de bacaladeros, y eso es la leche”.