La misma sala Riviera que albergó hace año y medio el fin de su anterior gira con un concierto único, ‘Motor City Show’, acogió la presentación del nuevo álbum de Miss Caffeina, Oh Long Johnson, frente a un público entregado.
La banda, que venía de haber ofrecido uno de los mejores conciertos del festival Warm Up 2019, prendió a las 21’30h la mecha de una noche llena de luz, color y también elegancia en la puesta en escena, en la que demostraron que están viviendo uno de los momentos más dulces de su carrera.
Con un Alberto Jiménez más cómodo que nunca sobre el escenario, Miss Caffeina comenzó incitando al salto con los primeros acordes del tema que da título a su nuevo trabajo, y que seguramente se convertirá en uno de sus himnos. Todos los temas de Oh Long Johnson –a falta de la balada del disco, Ausentes presentes– tuvieron cabida en el show. No faltaron momentos emotivos como la mención al bullying en la presentación de Calambre o Reina; y también a los problemas que hay en la industria musical, donde a veces escuchas cosas como «nunca digas que eres gay», explicó Alberto antes de entonar Fiesta nacional.
El público cantó con ellos cada uno de los temas nuevos, no dejó ni una frase solo en boca de Jiménez. Prueba de que el álbum, que lleva poco más de un mes en la calle, ha calado muy bien entre sus seguidores. Pero el grupo también recordó algunas de las canciones que les han acompañado a lo largo de sus casi diez años de carrera. Venimos, Detroit, Oh! Sana, Gladiador, Eres agua, Átomos dispersos o el hit absoluto Mira cómo vuelo, hicieron las veces de ventana al pasado reciente del grupo.
Si la fiesta parecía inmejorable, llegó el momento del bis con cambio de look incluido. Alberto lució una chaqueta de lentejuelas y se mostró más libre que nunca, un camino que ya fue abriendo en la última gira. La Riviera se convirtió en una discoteca a ritmo de Cola de pez, un potente tema al que añadieron –de manera muy efectiva– guiños a Freed from Desire de Gala y al mítico Vogue de Madonna, de quien el cantante es fan absoluto.
El brillo y la música disco fueron los protagonistas de la noche y de su final por todo lo alto. Y pusieron a Miss Caffeina en un merecido y muy prometedor lugar dentro del panorama musical actual.