No es una novedad que la presencia de Ciudadanos en el Orgullo fue muy polémica, y la Fiscalía de Madrid ha abierto una investigación a causa de la denuncia presentada por el partido político tras los incidentes durante la manifestación del Orgullo LGTB en Madrid.
Los naranjas dicen haber sufrido insultos y el lanzamiento de una botella de agua en mitad del paseo del Prado. Afirman que no pudieron moverse del lugar, ya que el público les “acorraló”, e incluso hicieron alguna sentada para impedir su movilización. Sin embargo, como se esperaba, el informe de la Jefatura Superior de Policía da una versión totalmente diferente; de hecho, contradice que se hayan producido dichas agresiones.
Cuatro días después de la manifestación, el partido de Albert Rivera presentó una denuncia en la Fiscalía General del Estado. En dicha denuncia argumentaban que habían sido víctimas de una “agresión orquestada”, y por ende, pedían que se investigaran delitos de amenazas, injurias y de odio. La denuncia presentada por Inés Arrimadas constaba de 37 folios, donde se detallaba la supuesta agresión.
Aparte de desmentir las acusaciones de Ciudadanos, el informe de la Jefatura Superior de Policía de Madrid apunta a que Ciudadanos está tratando de usar toda la polémica del Orgullo LGTB en su propio beneficio mediático.