El GHB o éxtasis líquido es un depresor del sistema nervioso central que inicialmente puede producir sensación de euforia. Los efectos de esta droga se producen unos 20 minutos después de su consumo, y su efecto total pasa a las tres o cuatro horas. Aumento de la sociabilidad, mayor capacidad comunicativa y aumento de los sentidos para las relaciones sexuales son algunos de los efectos que buscan sus usuarios. Sin embargo, es más probable que su consumo conlleve somnolencia, obnubilación, dolor de cabeza, confusión, alucinaciones e inclusive coma letal.
Los hallazgos provienen de una encuesta importante a consumidores gays de GHB realizada por Channel 4 Dispatches para BuzzFeed News y para el nuevo documental Sex, Drugs and Murder.
Según la encuesta, dos tercios de los hombres homosexuales que tomaron la droga sufrieron graves problemas, terminando en adicción, sobredosis y agresión sexual. Los hallazgos revelan que más de una cuarta parte de los usuarios informaron haber sido agredidos sexualmente, y uno de cada cuatro usuarios sabía de alguien que había muerto como resultado de usar esta droga.
La encuesta señala que casi la mitad de los usuarios de GHB se han desmayado por un consumo excesivo de la droga y alcohol. Son muchos los síntomas que hacen que salten las alarmas, entre ellos, los ronquidos. Ahora bien, la mayoría de los encuestados no sabían que los ronquidos podían ser una señal crítica de que se está cayendo en un coma letal.
El documental visibiliza los peligros del uso recreativo de esta droga por parte de hombres homosexuales. Además, se muestra la realidad que viven cientos de personas al año y la poca atención que se le está dando a esta problemática.
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