La presidencia de Donald Trump está causando estragos en el colectivo LGTBI+ en muchos aspectos, desde la educación hasta la salud, pero ahora ataca por otro flanco. Después de vetar a las personas transexuales en el ejército porque “ponía en riesgo la letalidad y eficacia militar”, su Gobierno ha decidido dar un nuevo golpe al colectivo, con la intención de que las empresas puedan verse respaldadas por el Tribunal Supremo para llevar a cabo despidos por razones de identidad sexual.
El próximo 8 de octubre se investigará si las leyes protegen o no a los afectados por este tipo de despidos, después de varios casos, que contaremos a continuación, de despido improcedente en los que gays y transexuales perdieron su puesto de trabajo por el mero hecho de verbalizar su condición e identidad sexual.
Uno de los casos es el de una mujer, directora de una funeraria, que se fue de vacaciones y decidió contar a sus compañeros que no volvería con el mismo sexo con el que se había ido. El dueño de la funeraria se enteró y fue fulminantemente despedida porque “ya no iba a vestir como una mujer”.
El segundo caso es el de un paracaidista que decidió bromear con una clienta con la que iba a realizar un salto; le dijo que no se preocupara si se pegaba mucho porque era gay… La mujer y su pareja interpusieron una demanda por el comentario y el chico perdió su trabajo. Y aunque el paracaidista falleció en 2014, el caso ha seguido adelante de manera póstuma.
Por último, a un trabajador social se le rescindió el contrato cuando sus superiores se enteraron de que era abiertamente homosexual.
En estos tres procesos, los demandantes se escudaron en la Ley de Derechos Civiles de 1964, que prohíbe la discriminación sexual en el trabajo, y va más allá de las simple diferenciación entre los géneros masculino y femenino.
Ante el desamparo legal de las personas intersexuales y transexuales, Robin Maril, directora asociada de la Campaña por los Derechos Humanos (HRC), manifestaba incrédula lo siguiente: “Cuando la Administración federal y los abogados del país se manifiestan contra ti y dicen que no tienes derechos, eso afecta a los miembros más vulnerables de nuestra comunidad”.