El actor, rapero e hijo de Will Smith lucía irreconocible en una de sus últimas publicaciones de Instagram.
En ella, Jaden Smith presumía de un cuerpo mucho más musculoso del que nos tiene acostumbrados.
Hablamos en pasado porque la foto ha desaparecido de su cuenta. Eso sí, aunque ya no está disponible para el deleite de sus seguidores, es fácil de encontrarla buceando en las redes sociales.
Si echamos la vista atrás a sus publicaciones, podemos ver que este potente físico ya estaba en camino. Jaden siempre ha sido un chaval delgado y fibrado pero no demasiado musculoso, probablemente debido más a la falta de grasa corporal que a matarse a hacer deporte.
Por eso intuimos que ha debido cambiar su rutina de ejercicios, centrándose en la parte superior de su cuerpo. Así, en el selfi presume de unos deltoides, pecho, brazos, tríceps y abdominales asombrosos, aunque la parte inferior parece descuidada.
A sus 22 años el protagonista de En busca de la felicidad o Karate Kid tiene a quien parecerse.
Solo hay que recordar que su padre pasó de ser el desgarbado príncipe de Bel-Air en los noventa a encarnar al peso pesado Muhammad Ali en 2001. Estamos seguros de que si continúa entrenando a este nivel conseguirá sus mismos resultados.
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