Federico García Lorca, reivindicado en un transgresor montaje: 'Doña Rosita, anotada'

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Llega El Pavón Teatro Kamikaze una original revisión del clásico de Federico García Lorca Doña Rosita, la soltera, firmada por Pablo Remón. En esta ocasión, titulada Doña Rosita, anotada.

Tras presentar cuatro magníficos espectáculos –La abducción de Luis Guzmán, 40 años de paz, El tratamiento y Los Mariachis–, su creador, Pablo Remón, se convirtió en una de las voces más innovadoras del actual panorama escénico español. El año pasado, Jaime de los Santos, entonces consejero de Cultura de la Comunidad de Madrid, le propuso adaptar y dirigir Doña Rosita la soltera, o el lenguaje de las flores, de Lorca, y Remón dijo que no.

“Rechacé el encargo”, declaraba Remón recientemente, “pero la obra se me quedó rondando, como un fantasma. Empecé a ver que aquello que creí que estaba muy lejos de mí (la historia de una solterona en Granada a finales del siglo XIX), en realidad no lo estaba tanto. Así que rectifiqué, y comencé a trabajar en Doña Rosita, anotada”.

En diciembre del año pasado se estrenó esta pieza, que logró agotar las entradas en todas sus representaciones. Los críticos la consideraron una de las mejores de 2019.

Ahora, El Pavón Teatro Kamikaze repone este transgresor montaje que cuenta la historia de una mujer provinciana que se promete con su primo. Él emigra a Buenos Aires y promete volver para casarse. Ella espera y espera, pero ese regreso que nunca se producirá.

Solo dos actrices, Fernanda Orazi y Manuela Paso, y un actor, Francesco Carril, se desdoblan en los múltiples personajes que aparecen en la obra del poeta granadino. Para Remón, esta es una versión libre, muy libre, pero que conserva la esencia del texto de Lorca. “Cuenta la obra y, al mismo tiempo, mi relación con ella. Es la obra de Lorca, pero leída, comentada y editada por mí”.