Cómo una albóndiga puede ayudar a conseguir un futuro más sostenible

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Renovarse o morir. Un simple refrán que lleva consigo un importante mensaje. Saber evolucionar, adaptarse a las nuevas circunstancias, a las nuevas tendencias y no dejar de mejorar debería ser un principio básico para todos.

Una muestra de esto la encontramos entre las novedades de IKEA. La firma sueca no solo trabaja para presentar colecciones nuevas basadas en tendencias contemporáneas, también cuida otros detalles importantes que forman parte de su esencia, y con los que se adapta a las necesidades de los clientes y aboga por un futuro sostenible.

Las cosas más pequeñas pueden marcar la diferencia, incluso una albóndiga. Así es, IKEA ha dado un paso más y ha lanzado su nueva albóndiga de proteína vegetal. Esta tiene el aspecto, el sabor y la jugosidad de la albóndiga de carne que se sirve en los restaurantes de la cadena, pero su huella climática es solo del 4%. En resumen, es igual de deliciosa, pero mucho más responsable con el medio ambiente.

Las albóndigas de proteína vegetal tienen el mismo reducido coste que las de carne, y se sirven con puré de patatas, crema, mermelada de arándano rojo y guisantes. Una opción apta para veganos y vegetarianos con la que IKEA Food se adapta a los nuevos tiempos.

Además de degustarse en sus restaurantes, las albóndigas vegetales pueden comprarse en sus tiendas. No podían privarnos de disfrutar de este delicioso plato en nuestras propias casas.