La serie The Mandalorian se estrenó hace poco menos de un año en Disney+ con la intención de extender el universo de Star Wars. Un exitoso proyecto que ha traído consigo a uno de los personajes más tiernos de esta popular saga, Grogu, más conocido como Baby Yoda.
Esta pequeña criatura ha conquistado los corazones de todos los usuarios en redes sociales, y protagoniza infinidad de memes que sacan a relucir su ternura. Sin embargo, de la noche a la mañana, Baby Yoda se ha convertido en un terrible guerrero que lucha por los derechos del colectivo LGTBI.
Para saber el porqué tenemos que remontarnos a la Navidad. En México, pequeñas figuritas de Grogu se introdujeron en varios roscones de Reyes, en sustitución del niño Jesús, como es tradición allí. Esto no sentó nada bien al Frente Nacional de la Familia ni a la población más conservadora, que lo vio como un ataque a su religión.
Las redes sociales no tardaron en hacerse eco de esta polémica, y fueron muchos los que encumbraron a Baby Yoda como un icono contra estos grupos conservadores. Una idea que fue haciéndose aún más grande, y que llevó a este pequeño ser ficticio a ponerse al frente del movimiento LGTBI contra el sector más arcaico y LGTBIfóbico del país.
Si bien es cierto que la polémica no trascendió más allá de las redes sociales, la idea de tener a un Grogu queer como icono nos encanta y nos parece de lo más divertida. Quién sabe, igual le apetece subirse a una de las carrozas en el próximo Orgullo.
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