Qué buena pinta tiene el primer teaser tráiler lanzado de la adaptación de West Side Story que firma Steven Spielberg. Una película cuyo estreno se ha ido retrasando debido a la pandemia, y que por fin llegará a las pantallas en diciembre.
West Side Story es uno de esos musicales que marcaron época. Y a día de hoy sigue estando considerado, merecidamente, uno de los mejores de la historia. Es uno de los favoritos de Spielberg, que llevaba años soñando con rodar su propia adaptación, y ya está más cerca de ser una realidad.
Se estrenó en 1957 en Broadway, con libreto de Arthur Laurents, música de Leonard Bernstein y letras de un jovencísimo Stephen Sondheim. Se convirtió en un éxito inmediato, como sucedió también con la adaptación cinematográfica dirigida por Robert Wise pocos años después, que logró en 1961 nada menos que diez Oscars. Steven Spielberg cuenta que de niño vivía obsesionado con su banda sonora, y por fin, muchas décadas después, ha podido hacer realidad su sueño de convertir el clásico musical en una película dirigida por él.
Ya hace tiempo que se hicieron públicas las primeras imágenes oficiales de este esperado remake, que llegará a los cines, si nada lo impide, el 10 de diciembre de este año. Una historia de bandas callejeras, amores interraciales –no deja de ser un Romeo y Julieta actualizado– y sueños de juventud que se desarrolla en Nueva York, y que regresa con una nueva visión, la del maestro Spielberg.
Si en su día El color púrpura no fue todo lo bien recibida que merecía, West Side Story tiene todas las papeletas para convertirse en un nuevo éxito de Steven Spielberg, que se vuelve a atrever con el género musical.
Spielberg ha declarado que quería cargar las tintas en los obstáculos que generan la xenofobia y los prejuicios raciales en la convivencia pacífica, y es un tema de plena actualidad en Estados Unidos, desgraciadamente.
Quiso contar con el guionista –abiertamente gay– Tony Kushner, con el que ya trabajó en Munich y Lincoln, y también se aseguró de que aquellos actores que fuesen a interpretar personajes hispanos tuviesen raíces latinas, para evitar lo que sucedió en la primera película, en que se recurrió al ‘blackfacing’ –o mejor dicho, ‘brownfacing’– para maquillar a muchos de los actores y oscurecer su tono de piel.
Para los papeles principales ha contado con Rachel Zegler, que retoma el personaje de María que hizo en su día Natalie Wood, y con Ansel Elgort como Tony –al que dio vida en la primera adaptación cinematográfica Richard Beymer–.
El gran puntazo del casting es, sin duda, la recuperación de la veterana Rita Moreno, que ganó un Oscar en 1961 como mejor actriz secundaria por su interpretación de Anita en la película original. En esta ocasión interpreta otro personaje, Valentina, la esposa del dueño de una tienda que se convierte en testigo mudo de algún momento clave de la historia.
Qué ganas de ver el resultado final, porque a juzgar por estas primeras imágenes, la nueva West Side Story dirigida por Steven Spielberg tiene una pinta estupenda, ¿verdad?
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