'Boys, Boys, Boys' reivindica que "no solo es una revista de pollas" en su número del Orgullo LGTB+

Temas: Arte, Erotismo, Queer, Revista

Tras la buena acogida que tuvo su primer número, ha vuelto Boys, Boys, Boys. «La respuesta fue fenomenal y superó nuestros sueños más locos», agradece su idéologo, creador y editor Ghislain Pascal. «Demuestra que hay mercado para una revista de papel bien producida, con fotos artísticas de fotógrafos gais y queer, pero que no solo es una revista de pollas», añade.

Este segundo volumen recoge la vida y obra de diez fotógrafos de todo el mundo, diez historias asombrosas con las que quieren seguir apostando por la diversidad. «Nos enorgullece particularmente dar la bienvenida al fotógrafo indígena peruano Inon Sani«, dice Pascal, fiel a su lucha por colaborar con artistas de etnias, culturas y lugares donde los derechos de los homosexuales están reprimidos y las vidas queer sufren una constante amenaza.

Como el primer número de Boys! Boys! Boys!, un dólar de cada ejemplar vendido fue donado a organizaciones benéficas que apoyan a la comunidad LGTBI+ y que luchan contra la epidemia del VIH/sida. En el caso del primer volumen, concretamente a la Elton John AIDS Foundation y a la Albert Kennedy Trust.

Este número tiene un significado especial porque, además, coincide con el mes del Orgullo. «A pesar de los grandes avances en los derechos LGTB de muchos países, no debemos olvidar que en muchos otros la homosexualidad sigue siendo ilegal, los derechos de los homosexuales están reprimidos y las vidas queer están bajo constante amenaza«, nos recuerda Ghislain, convencido de que con Boys, Boys, Boys! está poniendo su pequeño grano de arena para representar y celebrar la cultura queer.