Colombia: diversidad, color, amor y orgullo

Temas: Colombia, Viajes LGTBIQ+

Es uno de los destinos emergentes en lo que a turismo LGTBI se refiere, ya que Colombia es un país en donde la diversidad forma parte de su ADN. Entre sus numerosos tesoros por visitar, de grandes metrópolis a parajes naturales de ensueño, cualquier persona encontrará un lugar donde divertirse, relajarse y ser libre.

A pesar de su amplia riqueza histórica, natural y gastronómica, Colombia es un destino bastante desconocido aún para el colectivo LGTBI. Un país que lleva la diversidad por bandera, ya sea en términos de especies naturales, de culturas, de riqueza culinaria o de orientaciones sexuales e identidades de género. De hecho, ha sido reconocido como destino LGTBI en varias ocasiones, como en FITUR LGTB 2017, o en los World Travel Awards Suramericanos de 2018 y 2020. Allí los prejuicios se olvidan al cruzar sus fronteras, cuando nos adentramos en un destino sorprendente que rompe con la imagen que muchas personas pueden tener de él. Un lugar abierto, moderno y en constante evolución que te invita a celebrar que, seas como seas, te comportes como quien realmente eres.

CARTAGENA DE INDIAS

Comenzamos una breve ruta por algunos de los tesoros colombianos más importantes. La primera parada es Cartagena de Indias, una exquisita e histórica ciudad rodeada por una muralla del siglo XVI que los españoles construyeron para defenderla de los ataques enemigos y que hoy es una de las joyas del Gran Caribe colombiano.

Es imprescindible perderse por su corazón, donde se encuentran las animadas calles del casco antiguo; o visitar la increíble Catedral de Santa Catalina de Alejandría y el enorme Castillo de San Felipe de Barajas, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Si pisas Cartagena, no puedes irte sin disfrutar de alguna de sus maravillas naturales como el bosque de manglares, el volcán de lodo o sus hermosas playas; la más LGTB es playa Hollywood, en el barrio El Laguito. En la península de Barú, a tan solo dos horas de la ciudad, se ubica un resort muy romántico y relajante con aguas cristalinas.

BOGOTÁ

La capital del país reúne infinidad de planes por hacer a lo largo de sus casi 2.000 kilómetros cuadrados. Una ciudad ecléctica y heterogénea que alberga joyas como la Catedral Primada de Colombia, en la plaza Bolívar, el atractivo barrio de La Candelaria, los museos de Botero y del Oro y la fascinante Catedral de Sal de Zipaquirá, un templo tallado en sal a 180 metros bajo tierra, a las afueras de la ciudad.

Visitar Bogotá es darle una oportunidad a unas lecciones de salsa con alguna clase privada; o disfrutar de su increíble gastronomía en un restaurante con vistas a toda la ciudad; o vivir su noche en algunos de los clubs más conocidos, como el Theatron, el club nocturno gay más grande de América Latina, que cuenta con 15 salas distribuidas en 5 pisos. Un paraíso para bailar y disfrutar con tus amigos o tu pareja.

BARRANQUILLA

Llegamos a la ciudad con uno de los carnavales más populares del país y de Latinoamérica: el Carnaval de Barranquilla. Esta maravillosa fiesta se celebra cada año y reúne a cerca de dos millones de personas; en ella se celebra la riqueza cultural de la costa del Caribe colombiano, donde por supuesto también tiene hueco el colectivo LGTBI gracias a la Guacherna Gay. Este es un evento tradicional que se celebra desde hace años y que ya es parte imprescindible del Carnaval de Barranquilla.

Pero además de esta festividad, la ciudad cuenta con enclaves de obligada visita como la Plaza de la Aduana, el Museo Romántico, las Bocas de Ceniza, donde se unen el río Magdalena y el Gran Caribe colombiano, la Iglesia de San Nicolás de Tolentino, de gran importancia para los barranquilleros, o la Ventana al Mundo, un monumento que refleja el color y la diversidad de Colombia.

MEDELLÍN

La última parada de este pequeño tour es Medellín. Un lugar que ha sabido reinventarse y explotar sus reclamos turísticos hasta convertirse en una de las mejores ciudades para vivir, y también una de las más innovadoras. Entre sus calles encontramos monumentos como la Plaza Botero, donde se ubica el Palacio de la Cultura Rafael Uribe Uribe, uno de los edificios más bonitos de la ciudad, en cuya terraza abierta se puede disfrutad de unas vistas espectaculares. También se debe visitar la Casa de la Memoria o el Parque de Berrío, que muchos consideran el alma de Medellín.

Para ver otro lado de la ciudad, lo mejor es descubrir su ocio nocturno. El centro de Medellín ofrece todo lo que se necesita para pasar una noche ideal. Desde empanadas fritas, pizzerías artesanales, bares donde degustar algunas de las bebidas locales y bailar un poco o algunos clubs queer que se encuentran en el barrio rojo LGTBI de Medellín.

A las personas que busquen algo más de calma, el departamento de Antioquia les tiene preparado un lugar que algunos consideran el mismo paraíso. Hablamos de la Laguna de Guatapé, a dos horas de la ciudad. Un paisaje único que puede contemplarse en su plenitud desde lo alto del Peñol, a 200 metros de altura, donde se percibe la inmensidad del lago. Una experiencia espiritual fascinante.