La pareja de influencers formada por Marta Cillán y Sara Giménez, más conocidas como Devermut, vuelve a estar en el centro de la polémica. Las chicas denunciaron a una sala de fiesta de Conil (Cádiz) por un supuesto trato discriminatorio y homófobo. Ahora el local ha publicado las imágenes de seguridad para demostrar que sus acusaciones no son ciertas.
Las chicas subieron unas historias contando su experiencia y aseguran que el personal del local las expulsó de malas maneras y que la gente de la discoteca les hizo sentir incómodas y acosadas por sus miradas y actitudes homófobas. Tal ha sido el alcance de este testimonio que el pub La Luna (donde tuvieron lugar los incidentes) ha publicado un comunicado de prensa explicando las auténticas razones de su expulsión. Y las grabaciones de esa noche no dejan lugar a dudas sobre lo que pasó realmente.
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La discoteca ya ha anunciado que emprenderá acciones legales contra Devermut y cualquiera que extienda esas falsas acusaciones. Tal y como vemos en las imágenes y el hilo muy bien explicado por @Malbert, en ningún momento son acosadas, discriminadas ni tratadas de malas maneras por parte del personal ni de las personas a su alrededor. Parece que esta vez las Devermut, orgullosas feministas trans-excluyentes (TERFS), han patinado un poco. Estas defensoras de las causas sociales (siempre y cuando no traten sobre personas transexuales) tendrán que enfrentarse ahora a sus palabras y asumir las consecuencias de las mismas.
HILO de lo mentirosas que son las DEVERMUT y como se han aprovechado de la lucha de un colectivo para justificar sus actos de niñatas inmaduras.
— MALBERT (@ItsMalbert) September 4, 2021