PIEDRAS
Estando libre de pecado, tiré la primera piedra, y escondí la mano.
Dos meses más tarde tropecé con ella
y me quedé de piedra al ver que era la misma que un día lancé.
La volví a tirar lo más lejos que pude, con todas mis fuerzas, y un mes más tarde en mi tejado me la encontré.
Dicen que menos da una piedra, pero esta piedra a mí, me da de más.
Y cuando se trata de elegir entre piedra, papel o tijeras, siempre la elijo a ella, porque sé que tarde o temprano me verá por su vera pasear.
Poemas y relatos cortos escritos por el escritor y docente Juan Carlos Prieto Martínez
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ILUSTRACIÓN: David Rivas