Probablemente, mantenerse en un perfil bajo desde su presentación como candidata al Benifest fue una estrategia que, premeditada o no, ha acabado jugando a su favor. La falta de expectativa de los eurofans, sumada a su exigente puesta en escena y al derroche de energía sin tregua sobre el escenario han conseguido dar el vuelco y catapultar a Chanel a lo más alto de las quinielas eurovisivas. La artista nos dejó, literalmente, sin aire.
“Chanel ha servido coño y nos ha dado lo que queremos todes. Acabo de lanzar todas mis pelucas por la ventana”, tuiteaba con acierto la finalista de Drag Race España Killer Queen.
“Chanel, enhorabuena, vas a estar booked en todos los Orgullos de aquí a 2050”, le pronosticaba @pensansa. (y ojalá no se equivoque).
“Chanel ha deslumbrado con una escenografía muy elaborada con ella como protagonista. Con Slomo la cantante muestra todo su carisma y energía”, desglosaba @benifestivalen.
En la misma línea, @luismesacabello describía: “España nunca ha tenido un pack escénico tan redondo y costoso como el de Chanel Terrero. Una auténtica barbaridad. Un desembolso brutal. Te deja embobado tres minutos”.
Otros elementos que hicieron redondo el show de la talentosa actriz y cantante fueron el vestuario de inspiración torera confeccionado por Carmen Farala y, por encima de todo, el cuerpo de baile.
Los bailarines que la acompañaban (Exo Narcos, Haley Fitzgerald, Josh Huerta, Pol Soto, Raquel Caurin y Ria Perez), coreografiados por Kyle Hanagami, funcionaban como un reloj y convirtieron la fiesta de Slomo en un espectáculo perfectamente engrasado donde Chanel brillaba.
Pol Soto
Exon Narcos
Ria Perez
Kyle Hanagami
Josh Huerta
Raquel Caurin
Haley Fitzgerald
“Son la crème de la crème”, nos avanzaba hace unos días la artista refiriéndose a sus bailarines. «La coreografía es redonda, perfecta para este número, y está hecha para mí, así que me puedo lucir en todos los aspectos. Por eso quiero que sea una sorpresa”, añadía.
También nos confesaba que ahora que se ha sumergido en esta fantasía se ha dado cuenta de que su cultura eurovisiva no era tanta como pensaba. Pero está claro que si algo tiene Chanel es capacidad de aprendizaje y, además, todavía queda mucho tiempo para Turín…
Así que mientras contamos las horas para ver si para la final del Benidorm Fest se ha guardado un as en la manga con el que volver a noquearnos, os animamos a volver a leer la entrevista que le hicimos antes de viajar a Benidorm. “Es una llamada al empoderamiento. Cuando la escuchas te dan ganas de ponerte la corona y salir pisando fuerte con tus tacones… o tus bambas, da igual. Además, la canción es muy sensual. Te hace sentir grande». No exagerabas, así nos sentimos nosotros ahora, Chanel.
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