«Quiero que esta plataforma dé voz a los deportistas y sus increíbles experiencias para que, a través de sus propias historias, puedan convertirse en ejemplos para otros atletas en situaciones similares”. De esta manera explica Javier Raya en qué consiste su nuevo proyecto. También recalca su deseo de acabar con las diferenciaciones de raza, género u orientación sexual que tienen aún mucho peso dentro del deporte.
Es incuestionable el talento de Javier Raya sobre el hielo, que aparte de haberle catapultado hasta la competición olímpica, desde su infancia ha sido para él una vía de escape y un espacio donde descansaba de las burlas de sus compañeros de colegio. «Sufrí acoso escolar y el deporte fue lo que me ayudó a resistir”, explica. Asegura también que, gracias a compartir momentos y experiencias con sus compañeros deportistas, entendió que no estaba solo. “En el patinaje, nunca me sentí discriminado en mi entorno», afirma.
En 2016, dos años después de su participación en los Juegos Olímpicos de Invierno en Sochi (2014), fue cuando hizo pública su orientación sexual, y reconoce que el deporte le aportó seguridad a la hora de dar este paso. Desde 2018, dejó de competir para formar parte del Comité Olímpico Internacional (COI), dentro del programa Young Leaders. Es una iniciativa que asesora, forma y financia a aquellas personas que desean emprender un proyecto social que arranque desde el deporte para cambiar y mejorar la sociedad.
Así nació Compete Proud, plataforma con la inclusión y la diversidad como objetivo principal. En ella, Javier Raya, desde sus vivencias personales como deportista perteneciente al colectivo, quiso crear un espacio seguro a gran escala, donde deportistas LGTB+ volcaran sus experiencias con intención de que sirvieran de ayuda a aquellos que pasan por una situación similar.
Son amplios los recursos que ofrece Compete Proud: publicaciones, informes, investigaciones, y herramientas destinadas a formar a los usuarios y ayudarles a crear talleres sobre diversidad, igualdad e inclusión. “Estos recursos ofrecen a asociaciones, clubes o instituciones deportivas las herramientas necesarias para adoptar nuevas estrategias y mejorar su inclusión. […] En resumen, este apartado más pedagógico de la plataforma tiene como intención fomentar el cambio en distintos niveles del mundo deportivo”, aclara el patinador.
Al mismo tiempo, asegura que cada vez son más los deportistas olímpicos y de alto nivel que viven su sexualidad o su identidad de género libremente, y cree que es crucial que esto suceda para que los atletas emergentes puedan tener referentes y puedan coger impulso para no esconderse, en caso de que se encuentren en una situación parecida. “En los últimos Juegos Olímpicos participaron más de 180 deportistas abiertamente LGBTQ+. […] Es importante que se sepa que el deporte es un lugar seguro en el que se fomenta el respeto y la amistad, creo que es un mensaje potentísimo”, concluye Raya.
El patinador considera que contar su caso y encontrarse con personas dentro del patinaje artístico que podían empatizar con él, le ayudó a dejar de sentirse solo. Y quiere que el resto de deportistas del colectivo se den cuenta de que tampoco están solos.