El 16 de octubre, miles de personas se manifestaron en la capital de Eslovaquia contra la LGTBIfobia. La marcha ha sido organizada tras el tiroteo del pasado miércoles, en el que dos personas fueron asesinadas por un joven neonazi en un pub LGTB de Bratislava. En el ataque, una tercera persona resultó herida.
Los asistentes recorrieron el centro de la ciudad al grito de “no nos callaremos”, y finalizaron el trayecto frente al Parlamento eslovaco.
La organización que convocó la marcha explicó en un comunicado las intenciones de la misma: “Nos unimos en este día para demostrar nuestra solidaridad con las personas queer y decir alto y claro: no a la queerfobia, al racismo, al nacionalismo, al antisemitismo. Sobre todo, no al fascismo en todas sus formas”.
La asociación publicó un mensaje de esperanza en Facebook: “A pesar de las trampas de vivir bajo el sistema capitalista patriarcal y de los encuentros diarios con la violencia de género, creemos en la fuerza de la comunidad LGTBIQA, que nunca dejará de luchar por sus derechos”.
Por otro lado, los oradores de la movilización reclamaron “la adopción de cambios legislativos que garanticen los Derechos Humanos recogidos en los acuerdos europeos e internacionales a todas las personas con una orientación sexual diferente”.
El ataque
El autor del tiroteo, Juraj K., era un estudiante de 19 años que, horas antes del ataque, publicó en redes sociales «Una llamada a las armas», un manifiesto con tintes nazis de 65 páginas. En él, justificaba el ataque y se manifestaba en contra de las personas migrantes, judías y del colectivo LGTB.
“Todos sabemos quiénes son las principales ‘personas’ responsables, cuyas cabezas (y narices) deben estar en el tajo, a quien culpar de todo este lío. A quién culpar por el aumento de la degeneración, la mariconería, el transexualismo, la desviación de todas las formas, el lavado de cerebro masivo del público a través de los medios, periódicos y ahora las redes sociales, y por esclavizarnos financieramente”, decía en el manifiesto.
Como explica Miquel Ramos en el periódico La Marea, el manifiesto recuerda a otros alegatos de terroristas neonazis, como el del noruego Anders Breivik, que acabó con la vida de 77 personas en 2011, o el del neozelandés Brenton Tarrant, autor del asesinato a 51 personas en una mezquita de Christchurch en 2019.
El texto incluía el símbolo nazi del sol negro, vinculado al ocultismo nazi. Además, también es el signo que portan los soldados del batallón neonazi que lucha en Ucrania (Azov).
Según el diario La Marea, Juraj K. aseguraba en su escrito que existe “un complot judío mundial que favorece las migraciones y las mezclas raciales”.
El joven neonazi fue encontrado muerto horas después del ataque cerca del Ministerio de Educación eslovaco. Según la BBC, Juraj K. sería hijo de un excandidato de un partido de extrema derecha.
La respuesta del Gobierno eslovaco
Zuzana Caputova, presidenta del país, declaró al diario Plus que “los crímenes de odio no son un ataque solo a alguna comunidad o minoría. Están dirigidos a todos nosotros, porque están dirigidos a los valores básicos de nuestra sociedad».
El primer ministro de Eslovaquia, Eduard Heger, escribió en Twitter: “Condeno enérgicamente el asesinato de dos jóvenes tiroteados anoche en Bratislava por un adolescente radicalizado”.
Además, añadió que “ninguna forma de supremacismo blanco, racismo y extremismo contra comunidades, incluida la LGBTI, puede ser tolerado”, y aseguró que el Gobierno se encargaría de proteger a las minorías.
I strongly condem a murder of two young people shot dead in #Bratislava last night by a radicalised teenager. No form of white supremacy, racism and #extremism against communities, incl. #LGBTI, can be tolerated. We will fight disinfo channels spreading hate &protect minorities
— Eduard Heger (@eduardheger) October 13, 2022
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, dio el pésame a los familiares de las víctimas en un tuit: “Estos asesinatos terribles son una amenaza para las sociedades construidas sobre el respeto y la tolerancia. La UE se compromete a ayudar en la lucha contra los delitos de odio en todas sus formas”.
Se ha difundido en redes sociales la identidad de los dos jóvenes asesinados en el tiroteo, llamados Matus y Juraj. La reacción de los usuarios ha sido también de condena al nazismo y de crítica a aquellos que dan voz a este tipo de discursos.
https://twitter.com/Miquel_R/status/1580851273066196992?s=20&t=UAO7UH6bNhGaK3CjWuvSmA
Marcus y Juraj nos recuerdan a otras víctimas asesinadas por LGTBfobia, como Samuel Luiz o Jeisson Vázquez. En España, los ataques homófobos no dejan de crecer, y en Europa la extrema derecha se está extendiendo a una velocidad vertiginosa. En estos momentos, es crucial que el colectivo LGTB una fuerzas para combatir un odio que, desgraciadamente, parece no tener fin.