El colectivo LGTBI+ siempre ha sido un crisol de opiniones en cuanto a temas sensibles como la representación del mismo en productos culturales, incluyendo cine, series y publicidad. Existe una urgente necesidad de acelerar el proceso de normalización a través de la visibilización de identidades, sexualidades y tipos de familias diversas. Sin embargo, a pesar de compartir la búsqueda común de una mayor representación, también es evidente que dentro del propio colectivo existen conflictos y contradicciones.
Recientemente, se ha generado un debate en torno a la campaña publicitaria de Bankinter, titulada Una historia de progreso. Este anuncio, que comenzó a emitirse el domingo 7 de mayo, busca transmitir el compromiso de Bankinter con sus clientes y la sociedad en general, destacando los avances que ha vivido la sociedad española a lo largo de la historia. En una parte del anuncio se mencionan las expresiones: «mamás con mamás» y «papás con papás», como parte de la normalización evolutiva del país. Esta inclusión ha generado opiniones dispares dentro del colectivo, algunas de las cuales critican a Bankinter por realizar lo que se conoce como pinkwashing o comercialización del colectivo. Por lo tanto, es necesario profundizar en este concepto y explorar las diferentes perspectivas al respecto.
Resulta curioso que el mismo colectivo que critica abiertamente términos homófobos como «inclusión forzada» refiriéndose al cine y la televisión, ahora critique a Bankinter por promocionar un banco que defiende públicamente a una parte del colectivo LGTBI+ a través de la normalización de las parejas del mismo sexo. Entonces, ¿qué es exactamente lo que nos molesta del anuncio de Bankinter? ¿Que intenten vendernos un banco que defiende los derechos del colectivo LGTBI+ a través de su publicidad? En ese caso, ¿qué deberíamos exigirle a este banco? No olvidemos que Bankinter no es una ONG que aboga exclusivamente por los intereses de una comunidad, es simplemente un banco que busca realizar su actividad de manera inclusiva y acorde al contexto social actual. Nos aseguran que no seremos discriminados por nuestra identidad u orientación sexual, y ¿no es eso precisamente lo que buscamos?
Si catalogamos como pinkwashing todos los productos publicitarios, también deberíamos reflexionar sobre quiénes están detrás de los productos culturales que consumimos, como productoras de televisión o cine, actores e incluso los detalles más mínimos que conforman estas producciones. ¿Cuántas personas se benefician económicamente al contar historias LGTBI+ sin ser parte del colectivo? Es muy probable que sean las mismas que se beneficiarían contando cualquier otra historia. Mi punto es el siguiente: si la publicidad siempre será publicidad y los bancos siempre serán bancos, ¿por qué no celebrar y apoyar a aquellos que dan un paso más hacia la visibilización del colectivo, incluso si no es perfecto? De hecho, es lógico que no lo sea, ya que la publicidad refleja la sociedad actual tal y como es, y al igual que las personas formamos parte del colectivo, también somos parte del público objetivo de las empresas. No debemos olvidar que las personas que consumimos publicidad somos las mismas que la crean.
En resumen, Bankinter se enorgullece de ser un banco que recuerda a la sociedad española los logros que hemos alcanzado juntos a lo largo de nuestra historia. Desde la llegada a América, pasando por el siglo de oro, la construcción de Barcelona ’92 y el desarrollo del AVE tras una exitosa transición a la democracia. Todos los avances que hemos realizado como sociedad ha sido no enfrentándonos, sino apoyándonos mutuamente. En la elección de a qué empresas apoyamos de entre todas las opciones posibles, recae nuestra responsabilidad como colectivo y como individuos. Por lo tanto, es importante alentar a las empresas que respetan la diversidad, promueven la igualdad de género y se comprometen a garantizar un futuro mejor para las generaciones venideras.
En definitiva, celebremos los avances hacia una mayor visibilización del colectivo LGTBI+ y apoyemos a aquellas empresas que se esfuerzan por incluir y representar a la diversidad en sus mensajes publicitarios. Ya que solo a través del diálogo constructivo y el fomento de la igualdad, podremos seguir avanzando como sociedad hacia un futuro más inclusivo y respetuoso para todos.