Mientras esperaba el autobús de regreso a Las Matas, el joven fue víctima de un ataque homofóbico, que según él la guardia civil no se tomó con seriedad.
Mario Sanse se acababa de mudar a Las Matas, un barrio de la localidad madrileña de Las Rozas, que estaba en fiestas, y decidió acercarse al recinto ferial; más tarde, se dirigió a la discoteca Aperitoche.
Sin embargo, su noche de fiesta se convirtió en una pesadilla. A la salida de la discoteca, en una parada de autobús, dos individuos se acercaron a él, y al grito de «mira este maricón», lo agredieron a puñetazos y lo tiraron al suelo, antes de huir cobardemente.
No cuento todo esto por dar pena. Lo cuento porque no es un caso aislado. Las agresiones hacia personas LGTB pasan con mucha frecuencia y ya estoy harto.
DEJADNOS EN PAZ ‼️‼️‼️— @ MarioSanse (@MarioSansee) October 4, 2023
Afortunadamente, la historia cuenta con héroes anónimos. Dos chicas que se encontraban cerca del lugar vieron a Mario herido y, sin dudarlo, lo llevaron en su taxi de regreso a casa. Su generosidad y solidaridad ante un momento así demuestra que, a pesar de la violencia y la intolerancia, existen personas buenas dispuestas a ayudar a quienes lo necesitan.
Al despertar al día siguiente, la víctima buscó atención médica y recibió el parte necesario para proceder con la denuncia de la agresión. Sin embargo, al acudir a la guardia civil se encontró con una respuesta desalentadora. Le dijeron que no podían ayudarlo porque tenían dificultades para entenderle debido a su labio hinchado. En lugar de ofrecerle apoyo, le indicaron que esperara durante varias horas.
Incluso cuando solicitó ayuda a un coche de policía que pasaba cerca, la respuesta fue igual de frustrante. Se le negó la asistencia y se le respondió con desprecio.
El impactante testimonio de este joven, expresado a través de las redes sociales, es un recordatorio más de que la violencia homofóbica no es un hecho aislado, sino una triste realidad que muchas personas LGTBIQ+ afrontan diariamente.
Es esencial que las autoridades y la comunidad en su conjunto se unan para abordar y condenar estos actos de odio. Además, es crucial que se brinde un apoyo adecuado a las víctimas de estos ataques.