Todos recordamos esas peluquerías a las que nuestras madres, abuelas y tías acudían para pasar horas bajo el influjo de los tintes y las revistas del corazón que se apilaban sobre las mesitas. Centros de belleza a los que ibas siendo una y salías siendo otra muy distinta, también por todo lo que arreglabas en su interior.
Esas peluquerías convertidas en confesionarios son las que inspiran Palacio Estilistas, la ópera prima de Moisés Martín, la historia de una peluquera que quiere dar un cambio a su vida para llenarla de nuevas y trepidantes emociones. La película se estrena el próximo 12 de enero en cines.
Juana está cansada de ser peluquera, harta de los cotilleos de revista, de las vecinas, sus pelos y su día a día con olor a laca. Por eso, cuando se le presenta la oportunidad de vivir una historia diferente, emocionante y llena de peligro, como la de descubrir el delito de unos clientes, se lanza sin pensarlo. Moisés Martín dirige Palacio Estilistas, su primera película, protagonizada por Goya Toledo.
Una comedia costumbrista de enredo que cuenta con una puesta en escena autoral y muy colorista, que bebe de las comedias clásicas de Hollywood. Una historia trepidante donde encontramos a Julia Fernández, una actriz trans interpretando a un personaje cis, y a Diana de María, una actriz cis haciendo de personaje trans.
Según el propio director, la película nace del propio cotilleo, del mundo de las peluquerías de toda la vida, de esa imagen de una señora con los rulos puestos leyendo una revista bajo el secador mientras soluciona sus problemas y arregla su vida. “Eso era lo que más me interesaba. Un salón de belleza como un confesionario, como una terapia de grupo, como un auténtico campo de batalla”, cuenta el director, que quiere modernizar el concepto de la familia mediterránea. En la cinta participa también una Lolita Flores chispeante y divertida que promete sacar más de una carcajada.