El ilustrador José Manuel Hortelano, también conocido como ‘Pi’, creó en 2007 Onán, un fanzine LGTBIQ+ de ilustración erótica con el que se planteó ahondar en conceptos como la intimidad y el autoerotismo. Su segundo número vio la luz hace cinco años, y recientemente lanzó un crowdfunding para hacer realidad su tercera entrega, que no ha podido tener mejor acogida hasta el momento.
En este nuevo Onán se recogen, además de las obras realizadas por José Manuel Hortelano, diálogos con muchas personas que ha ido conociendo en las redes durante años y que han participado como modelos en la publicación. Algunas de ellas también han escrito textos contando cómo ha sido su experiencia al ser retratado y sus sensaciones al verse desnudos en ella.
Hablamos con José Manuel Hortelano ‘Pi’ sobre esta aventura tan personal que le permite no solo mostrar a los hombres que se han prestado como modelos para él, también le da una nueva oportunidad de reivindicarse como voyeur.
SHANGAY ⇒ ¿Qué supone Onán dentro de tu trayectoria artística?
JOSÉ MANUEL HORTELANO ‘PI’ ⇒ Cuando empecé este proyecto, hace quince años, quise crear una publicación para recoger las ilustraciones más personales que no tenían cabida en otros sitios. Quise crear una revista de ilustración erótica que no encontraba en otros sitios. A día de hoy sigo manteniendo esa idea, y me gustaría que siguiera creciendo, haciéndola más grande, con más colaboraciones de ilustradores y, en definitiva, crear un espacio donde reunir un tipo de ilustración que es difícil de encontrar fuera de Internet. Onán es, dentro de mi trayectoria artística, mi proyecto más personal, el que más habla de mí mismo.
SHANGAY ⇒ ¿Por qué se ha hecho tanto de rogar el tercer número?
JOSÉ MANUEL HORTELANO ‘PI’ ⇒ Teniendo en cuenta que del primero al segundo pasaron diez, años ahora he tardado la mitad de tiempo… [risas]. En realidad, ha habido varios motivos que han ocasionado este retraso; el primero, la pandemia. Fue un tiempo que no viví demasiado bien, y me costaba pensar en este proyecto. Segundo, la búsqueda de un buen diseñador que supiese poner orden a todos mis dibujos. Hablé con un par, pero por diversos motivos no sentí que había dado con el adecuado hasta encontrar a Damien Filliatre.
Y sobre todo, lo que más lo ha retrasado es que el tiempo que dedico a dibujar para Onán es el que me sobra entre los trabajos comerciales que me dan de comer. Onán es algo que quiero ofrecer a la gente que está interesada en este tipo de ilustraciones, pero tengo que dejarlo aparcado cada vez que tengo que dibujar para ganarme la vida.
SHANGAY ⇒ ¿Te resulta fácil encontrar ‘aliados’ que retratar y que compartan cómo viven el autoerotismo?
JOSÉ MANUEL HORTELANO ‘PI’ ⇒ No tengo problema para encontrar gente que me envíe fotos para el proyecto. De hecho, tan solo el cinco por ciento vienen de gente a la que se lo pido expresamente. Siempre dispongo de material suficiente para hacer dibujos, bocetos, probar cosas nuevas. Me siento afortunado al ver que tanta gente confía en mí para enviar fotos tan íntimas. El primer número salió en la era pre-selfi, pre-Instagram, y me costó un poco más. Ahora estoy encantado con estos tiempos tan exhibicionistas que estamos viviendo.
«Me siento afortunado al ver que tanta gente confía en mí para enviar fotos íntimas»
SHANGAY ⇒ ¿Cuánto hay de voyeur en ti en la aproximación a Onán?
JOSÉ MANUEL HORTELANO ‘PI’ ⇒ Cuando decía antes que este es el proyecto que habla más de mí es precisamente por mi naturaleza voyeur. Mi sexualidad es muy gráfica, y obtengo mucho placer de la imagen erótica y pornográfica; muchas veces, más que de la práctica sexual. Me fascina ver un cuerpo desnudo expresándose con libertad y naturalidad; me da mucha alegría ver a gente disfrutando de su sexualidad sin preocupaciones. El voyeurismo es el alma de Onán.
SHANGAY ⇒ Es evidente, como siempre en tu obra, que apuestas por una concepción del erotismo y de la representación de los cuerpos que huye de la normatividad. ¿Te sale así o lo buscas expresamente?
JOSÉ MANUEL HORTELANO ‘PI’ ⇒ A mí me gustaría que en Onán hubiese aún más diversidad y más representación de gente que normalmente no es objeto sexual en el mainstream. Formo parte del colectivo ‘bear’, y los que han conocido el proyecto a través de mí son amigos y gente que también forma parte de él. Por eso mis dibujos son de gente no normativa, no podría ser de otra manera. A mis amigas siempre les insisto para que me manden fotos, pero me cuesta mucho más que con los hombres. También me he sentido tentado de pedirles a personas trans o no binarias que formen parte del proyecto, pero al no conocer a muchas no quería falsear el resultado. Me gusta trabajar con la gente de mi entorno, ya que la intimidad es otro de los pilares de Onán.
SHANGAY ⇒ ¿Es especialmente importante para ti retratar al hombre LGTBIQ+ o no es ni mucho menos un requerimiento para tu inspiración?
JOSÉ MANUEL HORTELANO ‘PI’ ⇒ Considero que un hombre heterosexual también puede formar parte del colectivo LGTBIQ+, en tanto y cuando entienda su sexualidad de la forma en que el colectivo ha luchado por normalizar durante décadas. Eso sí, no podría retratar a un hombre que no esté de acuerdo con mis ideales en cuestión de libertad sexual, de género y de sus interpretaciones en la vida actual.
SHANGAY ⇒ ¿Qué es lo que más te atrae de seguir investigando el desnudo?
JOSÉ MANUEL HORTELANO ‘PI’ ⇒ El retrato siempre ha sido mi género artístico favorito; me fascina el cuerpo humano y su representación en el arte. Un cuerpo desnudo habla por sí solo de la evolución del ser humano desde que hay representación artística de él. Para mí, dibujar o pintar un cuerpo desnudo supone entablar una conversación con esa persona; me ha ayudado mucho a entender el mundo y situarme en el mundo que me rodea.
SHANGAY ⇒ ¿Ha sido la mejor vía posible para ti apostar por el crowdfunding para hacerlo realidad?
JOSÉ MANUEL HORTELANO ‘PI’ ⇒ Habría sido imposible hacerlo de otra manera, no habría podido asumir los costes de impresión. Tenía muchísimas dudas de que fuese a funcionar: ha pasado demasiado tiempo desde el último número y no sabía si aún habría gente interesada en este tipo de publicación. Afortunadamente, ya tenemos el mínimo para hacerlo realidad. Ahora solo falta un poco de dinero más para sumar unos extras que me encantaría regalar a todos los participantes.
SHANGAY ⇒ ¿Te va bien que se use Onán, precisamente, como estímulo masturbatorio?
JOSÉ MANUEL HORTELANO ‘PI’ ⇒ Al fin y al cabo, Onán es una recopilación de dibujos eróticos. Excitar con ellos es mi principal objetivo. Es una publicación destinada a un público adulto, y es una llamada a disfrutar del cuerpo, así que me encantaría que la gente se masturbase con él. Creo que todos los participantes tienen esa idea clara, y todos compartimos un mismo propósito.
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