Tontheridas: "(H)echo polvo"

Acabé cansado del trabajo esa semana. Siempre he intentado no meterme en temas que no tengan que ver con la docencia, que es a lo que llevo dedicándome veinte años, pero ese curso coordinaba un proyecto del centro y además tenía una tutoría que me quitaba mucho tiempo por temas varios. Llevaba un par de años sopesando lo de tomarme la excedencia que me había prometido durante el tiempo de encierro por el covid, y las promesas, hay que cumplirlas siempre. Decidí iniciar los trámites aun sabiendo que perdería mi plaza en el centro en el que llevaba trabajando cinco años, pero no me preocupaba ya que me aseguraban que me reasignarían otro en cuanto regresara. Otra cosa de la que me advirtieron antes de firmar fue de que mi jubilación sería dos años más tarde si decidía no trabajar los próximos 24 meses…, pero las promesas, al igual que ocurre con los años, hay que cumplirlas. Cuando llegué a casa, libre de tutorías, coordinaciones y obligaciones, tocaba decidir en qué ocuparía mi tiempo… Lo cierto es que nunca he sido de aquellos que disfrutan no haciendo nada, y aunque se me olvida muchas veces, hacer nada también es hacer algo. Estaba tan cansado aquella noche de viernes que decidí acostarme a las 21h. A la mañana siguiente decidiría si irme a Miami una temporada a casa de mi amigo Mike o a algún pueblo perdido de Italia donde perfeccionar mi italiano. Necesitaba alguna señal. Busqué la app que tantos buenos y malos momentos me había dado. Llevaba meses sin usarla por lo que tuve que volver a reinstalarla. “Italiano con ganas de marcha ahora” fue lo primero que me salió. Me venía bien todo: las fotos, la distancia, el rol, el tamaño, los tags, y hasta las estadísticas… Quién me iba a decir que ese día tan extenuante pasaría de estar hecho polvo a echarlo. Al día siguiente, me cogí el primer vuelo que había de Alicante a Milán con una mochila a medio llenar y muchas ganas de vivir nuevas aventuras…

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