El Senado mexicano aprobó este viernes una reforma para prohibir y sancionar las «terapias de conversión». Los denominados Esfuerzos para Corregir la Orientación Sexual y la Identidad de Género (Ecosig) llegan a su fin tras seis años de lucha legislativa. Ahora, cualquiera que forme parte de ellas se enfrenta a penas de entre dos y seis años de cárcel, con un agravante si la víctima es menor o tiene discapacidad. Las sanciones también pueden ser económicas.
Esta reforma del Código Penal y la Ley General de Salud ha salido adelante con 77 votos a favor, 4 en contra y 15 abstenciones. La primera propuesta para modificar la ley llegó en 2018, gracias a diputados LGTB como Temíscoles Villanueva, que hace unos años afirmaba que «no hay nada que curar, la homosexualidad no es una enfermedad, no estamos enfermos”.
Este diputado del partido Morena asegura que estas terapias no se tenían en cuenta ya que se realizaban en la clandestinidad. Amparados en retiros espirituales o coachings, trataban de cambiar la orientación sexual de la gente. Una de las promotoras de la ley, la senadora Patricia Delgado, también ha celebrado la noticia.
Este avance en los derechos LGTB en México contrasta con el retroceso que otros países están experimentando. El ejemplo más reciente es el de Irak con su ley anti-LGTB, que castiga con hasta 15 años de prisión a aquellos que tengan relaciones homosexuales.¡Lo logramos!
Están prohibidos en México los esfuerzos para corregir la orientación sexual e identidad de género #ECOSIG, mal llamadas “terapias de conversión”.
Nos costó casi seis años hasta ser el último dictamen en aprobarse en este periodo ordinario final de la LXV… pic.twitter.com/GDn61nIZaG
— Patricia Mercado (@Pat_MercadoC) April 26, 2024