Estamos siendo testigos de cómo la ultraderecha va cogiendo cada vez más fuerza en todo el mundo. Su auge es una realidad ante la que solo podemos hacer dos cosas: llorar o reír. Y para risas, las que desatan Las Huecas, el colectivo escénico que vuelve a agitar la escena teatral con Risa caníbal/Riure caníbal, una propuesta que transita entre la tragicomedia, el thriller psicológico y la sátira más mordaz. Ambientada en la sala de espera de una convención ultraderechista europea, la obra encierra a sus protagonistas en un limbo sin lógica, donde el humor se convierte en juez y verdugo. Una risa despiadada, casi divina, que empuja a los personajes al límite del absurdo exponiendo sus miserias hasta la autodestrucción.
“Es indudable que estamos ante un auge reaccionario en toda Europa y en el norte global. La normalización de discursos ultraconservadores, racistas, islamófobos, machistas y tecnofeudalistas inunda los medios, las redes sociales y los parlamentos. Ante este panorama, Las Huecas creemos que el teatro debe ser una herramienta de resistencia cultural. Así pues, es en el teatro donde denunciamos una usurpación laboral intolerable; la ultraderecha hace uso del espectáculo, del posthumor y de la ficción en sus formas de comunicación y divulgación para ganar terreno y dominar la agenda política”, explican las artistas.
Este nuevo montaje confirma la madurez artística de Las Huecas, formado por Júlia Barbany, Núria Corominas y Andrea Pellejero. Tras el éxito de su obra Aquellas que no han de morir, la compañía sigue apostando por un lenguaje escénico propio: irreverente, libre y profundamente crítico. “Por eso nosotras, las comediantes, respondemos con un ejercicio de reivindicación del humor como arma antifascista y antidogmática. Para ello, utilizaremos una teatralidad extrañada, donde importa la potencia visual y el juego entre las convenciones de la comedia y los lugares comunes del terror psicológico, haciendo uso de una forma teatral que llamamos metaclown directo, un ejercicio cómico que opera mediante la fragmentación de la máscara, la parodia degradada, el cuerpo grotesco y la caricatura surrealista”.
Con casi una década de trayectoria, Las Huecas han hecho de la colaboración horizontal su seña de identidad, trabajando sin jerarquías y creando desde lo colectivo. Su estilo fusiona el teatro europeo contemporáneo con la comedia y el humor satírico catalán, dando lugar a piezas tan impredecibles como necesarias.