La 22ª edición del Festival de Cine Europeo de Sevilla terminó el pasado fin de semana con el anuncio de su palmarés. Els mals noms (Los malos nombres), debut en el largometraje del cineasta Marc Ortiz Prades, se alzó con dos importantes reconocimientos: el Premio AC/E a la Mejor Dirección de Película Española y el Premio Queer Ocaña, que distingue obras de especial sensibilidad hacia la diversidad y las identidades disidentes.
La película, producida por las compañías valencianas Admirable Films y TV ON Producciones y la catalana Lamalanga Produccions, confirma así el impacto de una propuesta íntima y rigurosa, que revisita una figura histórica marcada por el estigma y el silencio.
El jurado del Premio AC/E resaltó la capacidad de Marc Ortiz para “articular un relato humano y complejo desde la periferia rural, humanizando figuras históricamente estigmatizadas y abordando con sensibilidad la memoria histórica, la diversidad y las sexualidades no normativas, así como el valor de las identidades territoriales”.

Foto: Lolo Vasco
Por su parte, el Premio Queer Ocaña distinguió el filme por su “entrañable, bello y estremecedor retrato de Florencio Pla, un hombre marcado por su intersexualidad que se convirtió en leyenda en una España atravesada por el odio de la guerra civil”.
Su director, exultante, declaró: «Con estos dos premios esperamos que esta película, tan pequeña en el sentido presupuestario, sea un impulso para poder hacer llegar su mensaje universal a cuanta más gente sea posible”. Además, la presentación de la película en Sevilla se completó con una mesa redonda dedicada a la memoria histórica y la intersexualidad. El encuentro, moderado por el director de Andalesgai y miembro de la Fundación Triángulo Andrés Vega, contó con Marc Ortiz Prades, la escritora –y familiar de Florencio Pla– Elena Solanas, autora del libro Florencio Pla, La Pastora: la dignidad robada, y el dibujante, cronista y activista sevillano Bernar Usk.
Un mito tergiversado por la dictadura con el que ahora se hace justicia
Els mals noms reconstruye la vida de Florencio Pla Meseguer, conocido como “La Pastora”, una figura marcada por la intersexualidad, la persecución y la manipulación propagandística del franquismo. Nacido en 1917, vivió más de 30 años como mujer hasta unirse a los maquis para escapar de la guardia civil y reconocerse como hombre. Poco tiempo después se convirtió en un mito tergiversado por la dictadura, chivo expiatorio de numerosos crímenes sin resolver.

“El vínculo personal que tengo con esta historia es tal que resulta imposible romperlo», contó su director y también guionista. «Me crie por las mismas calles por las que corría la Pastora, jugaba en los bosques donde se escondía y mi abuela, que es quien me lega su historia, fue una de sus modistas”.
Al protagonista lo interpretan, en las distintas etapas de su vida, Adrià Nebot, Álex Bausá y Pablo Molinero. En el reparto les acompañan, entre otros, Isak Férriz, Nacho Fresneda, María Maroto, Raquel Ferri, Patricia Bargalló, Àngel Fígols, Abdelatif Hwidar, Felipe Pirazán y Morgan Blasco.


