Son tantos los motivos por los que Edimburgo merece más de una escapada que enumerarlos ocuparía una revista entera. Resumidos: la ciudad es una joya, con el Castillo de Edimburgo dominándola desde lo alto, el Palacio de Holyrood, Calton Hill, su National Gallery, su popular calle Royal Mile… Hasta sus cementerios son una atracción turística. Sin olvidarnos de esos hombres con falda con los que soñar una aventura a lo Outlander… Y si tienes algo más de tiempo, recorrer las Highlands del norte de Escocia es más que recomendable (y no solo por su famoso ‘monstruo’).

Volvamos a Edimburgo, a uno de sus hoteles más emblemáticos, W Edimburgo, que desde su apertura hace ahora dos años se ha convertido en uno de los iconos arquitectónicos de la ciudad. Situado en pleno St. James Quarter, a un paso de todos sus highlights, posee 244 habitaciones, de las cuales 45 son suites a cual más impresionante. Se compone de varios edificios, que unen la tradición y la hospitalidad escocesas con el lujo y la tecnología más modernos.
Desde el W Deck y el W Lounge se disfruta de una vista panorámica 360º de toda la ciudad, ideal para degustar un whisky escocés o comer algo a cualquier hora del día. La alta gastronomía internacional está presente en su restaurante Sushisamba, que ofrece una fusión de cocina japonesa, brasileña y peruana. En Joao’s Place, los mejores cocktails te esperan para terminar el día de la mejor forma. Aunque algunos preferirán un relajante tratamiento en su Away Spa o activarse en su FIT gym. Cualquier opción es buena si confiamos en W y sus más de 60 hoteles en el mundo, que han roto los esquemas de la hotelería tradicional de lujo.
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La hora del té
No hay nada más British que tomarse un buen té a las 5 de la tarde. Toda una tradición que en W Edimburgo han actualizado con una selección de gourmandises tanto saladas como dulces, fusión de las cocinas japonesa, brasileña y peruana con productos escoceses en su espectacular restaurante Sushisamba. Un menó de cuatro platos de degustación y champán desde 65 libras, con música de DJ para amenizar la velada. Y para veladas especiales, ¿qué te parecería pasar la Nochevieja en el rooftop del W Edimburgo con vistas a toda la ciudad?








