Aunque Cesár Sampson obtuvo la calificación más alta del jurado profesional en el festival de Eurovisión, el televoto le relegó al tercer puesto de la lista con 342 puntos. El representante de Austria fue la gran sorpresa de la noche porque no partía como favorita, como sí eran Israel y Chipre, pero su tema Nobody But You consiguió colarse en el podium final de Lisboa.
Sin embargo, en las redes sociales pocos hablaban de las dotes musicales de César. Nadie hablaba de su épica puesta en escena, de la sentimental letra de la canción o de su portentosa y grave voz. Sus atributos físicos eran lo más valorado en Internet.
De hecho, nada más finalizar su actuación un meme muy picante empezó a correr como la pólvora. La foto mostraba un frame de la actuación de César con un paquete hiperbólico…
Aunque con toda probabilidad se tratase de una arruga, de un efecto visual o de un toque de photoshop, la verdad es que daba la impresión de tener un gigantesco falo colgando entre las piernas.
“El de Austria venía con su propio micrófono”, “Si gana muchos dirán que lo hizo con la polla”, decían algunos de los tuits más ingeniosos.
César Sampson, además de cantante, letrista y modelo es trabajador social, vive en Linz y tiene 34 años. Es también miembro de Symphonix International, un grupo de productores con base en Viena que llevaron a Bulgaria a obtener sus dos mejores resultados históricos en Eurovisión.
“Mi voz es el instrumento más desarrollado que tengo”, ha asegurado César sin hacer mención alguna a su entrepierna.