Un estudio publicado en Nature Communications ha aportado nuevos datos sobre el fármaco XVIR-120. Este podría administrarse de forma anual a través de una inyección. De esta forma, el fármaco sería útil tanto para el tratamiento de la infección por VIH como para la PrEP (profilaxis preexposición), la medicación que permite prevenir la infección.
La PrEP está financiada dentro del Sistema Nacional de Salud desde 2019. Según datos del CESIDA (la Coordinadora Estatal de VIH y sida), la PrEP reduce en más del 90% la probabilidad de contraer VIH si se toma diariamente. Para más información sobre la PrEP puedes consultar el Manual para la implementación de profilaxis pre exposición al VIH en España, elaborado por la Secretaría del Plan Nacional sobre el Sida en 2020.
XVIR-120 es un profármaco. Aunque el nombre puede resultar algo confuso, un profármaco es un medicamento que no actúa de forma inmediata una vez se ha introducido en el organismo. El profármaco es un compuesto que, después de la administración, es metabolizado (transformado) por el cuerpo, y a partir de entonces es cuando se convierte en activo farmacológico. Es decir, combate el virus.
Los investigadores han obtenido buenos resultados en ratas y ratones. Los organismos de estos animales mostraron que el fármaco se mantenía en niveles eficaces hasta un año después de la administración. En el caso del macaco, más cercano genéticamente al ser humano, los niveles fueron buenos hasta el día 224, cuando se tuvo que administrar otra dosis.
De momento, el XVIR-120 se encuentra en fase preclínica y aún queda mucho tiempo hasta su posible comercialización. El siguiente paso para que esto ocurra es testarlo en humanos.