La tristura presenta la obra de teatro 'Así hablábamos' en el CDN: "Juntas tenemos siete veces más fuerza que por separado"

Temas: Centro Dramático Nacional, Entrevista, Teatro

Decía la escritora Carmen Martín Gaite que cuando hay alguien con el que puedes hablar, que se quiten el cine, el teatro, los viajes y los placeres más fuertes. De esa idea de la comunicación y de las relaciones a través de la palabra nace Así hablábamos, la nueva obra de teatro de la compañía La tristura, que se estrena este 7 de febrero en el Teatro Valle-Inclán del Centro Dramático Nacional. La obra, a partir del universo de Martín Gaite, que se encuentra muy presente en la obra, es una larga conversación a través del tiempo. En ella, un grupo de amigos se reencuentra después de sufrir la dolorosa pérdida de uno de ellos. Su fin es el de seguir componiendo un disco que dejaron a medias.

La tristura es la compañía creada por Itsaso Arana, Violeta Gil y Celso Giménez. Hablamos con este último sobre la comunicación, el poder del teatro, la censura y el vigésimo aniversario de la compañía, que lo celebra por todo lo alto con esta obra.

SHANGAY ⇒ ¿Cómo surge Así hablábamos?
CELSO GIMÉNEZ ⇒ Es curioso porque es la primera vez que trabajamos a partir de un texto que no es nuestro. En este caso nace de La búsqueda de interlocutor de Carmen Martín Gaite y todo su universo. Encontramos una conexión muy importante entre lo que solemos contar y la poética de la autora. Ella escribía mucho del habla, la comunicación, la intimidad humana y el diálogo, que resume a su vez muy bien nuestra poética. Así que, a partir de todas esas ideas pensamos… ¿Qué pasa cuando pierdes un interlocutor? Y ahí empezamos a construir.

SHANGAY ⇒ ¿Hemos perdido la capacidad de comunicarnos?
CELSO GIMÉNEZ ⇒ Me cuesta tener una visión catastrofista y pensar que vamos a peor. Sí creo que vivimos en un mundo que piensa constantemente en producir y hay veces que nos paramos a hablar simplemente de nada, de nosotros, para conocernos. Juntarnos con las amigas, querernos y ya está. Hablar por el placer de hablar. A veces se habla mucho de los adolescentes, de las redes sociales, del individualismo…, pero si te das cuenta, cuando alguien está con el teléfono en realidad se está comunicando con otras personas, a través de otro medio, pero está hablando con alguien, recibiendo un like de otro, etc. Somos animales sociales y buscamos todo el rato interactuar con alguien de alguna manera.

SHANGAY ⇒ ¿Crees en el poder transformador del teatro?
CELSO GIMÉNEZ ⇒ Últimamente estoy valorando más esa conexión de estar en un mismo espacio con gente distinta compartiendo un momento único como es ver una obra. Ahora vivimos en un mundo donde lo audiovisual reina, pero el cine apenas tiene cien años y el teatro siempre ha estado ahí, así que algo debe tener. Una buena obra de teatro te impacta y te llega como ninguna otra cosa lo hace, y creo que tiene que ver con el directo y lo humano de ver que todo sucede de verdad. Ahora puedo ver una película cuando quiera o escuchar un disco cuando me apetezca, pero una obra de teatro te obliga a estar presente mientras ocurre la escena. Eso es muy impactante y efímero, porque cuando acaba desaparece esa magia, solo queda tu sensación y lo que recuerdas de ella.

SHANGAY ⇒ Parece que el teatro da miedo, en los últimos meses hemos visto varios casos de censura…
CELSO GIMÉNEZ ⇒ Es algo muy cabrón. A mí me sorprende lo paradójico del asunto, porque al final es algo muy poco mediático y reproducible como para querer quitarlo de en medio. Pero está claro que el teatro mueve, y tengo constancia de que, sobre todo en Madrid, hay muchísimo teatro, muchas salas de todo tipo, con obras de cualquier índole; y que alguien llegue al poder y eso le pique y le moleste… me llama la atención. Debe de ser algo muy importante para querer borrarlo. También creo que a veces se hace para demostrar que pueden hacerlo y lo hacen sin siquiera verlas, simplemente porque saben que va de dos chicos que se desnudan o se besan o sobre algo que no comulga con sus ideas… Directamente, la aniquilan. Luego hablan de adoctrinamiento. Cuando pasan este tipo de cosas pienso que hemos perdido un poco el sentimiento sindical. Juntas tenemos siete veces más fuerza que por separado.

SHANGAY ⇒ La tristura cumple 20 años este 2024… ¿Qué balance hacéis?
CELSO GIMÉNEZ ⇒ Es muy fuerte asimilar que hemos sobrevivido a todos estos años. Cuando empezamos con esto fue una locura, veníamos de provincias, de familias trabajadoras y sin ningún otro contacto con la cultura. Vivíamos en pisos de mierda y fue muy difícil poder compaginar todo eso con una compañía de teatro. Está claro que hemos tenido suerte y la vida nos ha sonreído, en aquel momento tuvimos la suerte de que las primeras obras nos funcionaron muy bien y poco a poco empezamos a hacernos un hueco. Somos muy afortunadas, y ver ahora que algo tan importante como el CDN confíe en nosotras es muy bonito y gratificante. Nos hace sentir que todo ha tenido sentido. Sobrevivimos a la pandemia, a la crisis económica, a las noches en vela y al miedo. Somos unas supervivientes.