El Hotel Olom abría sus puertas en junio de 2023 frente al principal monumento de Cádiz, su catedral. Con una ubicación indiscutiblemente privilegiada, y a pocos pasos del paseo marítimo, se define por su pasión por la ciudad y sus gentes. Apuesta por un concepto boutique, con 14 habitaciones, y cada uno de sus rincones busca transmitir a los huéspedes el encanto, la esencia y la cultura gaditanos.
La suya es una propuesta integral que combina alojamiento y distintos espacios gastronómicos –entre los que se encuentra su espectacular rooftop–, así como una sala de masajes y otra pensada para eventos, proyecciones y exposiciones de arte. La moderna domótica de sus instalaciones se combina con un sentido de autenticidad presente a través de la artesanía local en sus amenities y sus tocadiscos vintage, personalizados según los gustos de sus clientes.
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La amplia oferta gastronómica del hotel se materializa a través de cuatro espacios diferenciados: el restaurante Ettu, que apuesta por una cocina de origen; su rooftop Aleph, centrado en el arte de la mixología (y con vistas a la catedral); el Patio by Olom, para desayunar en un oasis en pleno centro histórico; y Momento, su terraza exterior, ideal para disfrutar de momentos inolvidables y con una relajación total.
El rooftop cuenta con una infinity pool que ya se ha convertido en uno de los spots más fotografiados de la ciudad. Además, cabe reseñar que dentro de su amplia oferta de cócteles llama mucho la atención su especial fusión de lo gaditano y lo mexicano. Y se encuentran desde opciones sin alcohol (mocktails) hasta una carta de bebidas especialmente diseñadas para mascotas. Una experiencia única a todos los niveles, en un hotel boutique en donde se cuida hasta el más mínimo detalle.
Exquisitez
El restaurante Ettu, liderado por el chef Álvaro Vela, ofrece una cocina de origen esencialmente gaditano –que se apoya en reminiscencias mexicanas y fenicias–, basada en la autenticidad de los productos y recetas de la tierra. En la carta se encuentran productos autóctonos como el atún de almadraba de Barbate, la caballa de la bahía de Cádiz, el calamar de potera y la carne de cerdo ibérico de La Muela. Las referencias mexicanas, a nivel gastronómico, enlazan directamente con la procedencia de los impulsores del proyecto, Origen Global. De esa manera, hacen un guiño a las raíces de quienes llegaron desde Cádiz a tierras mexicanas en el pasado.