Pasar de niño a hombre y seguir siendo 'Chico'

Fotos: Sergio Lardiez

Era un niño, aún le queda para ser un hombre, pero siempre será Chico. Y aunque tiene claro que su madre le va a cantar siempre, vive obsesionado con la idea de que algún día le abandonará y ya no habrá vuelta atrás. Ha crecido entre 7 y 10 ciudades, pero lo curioso es que su hogar siempre ha sido el mismo. Aquel que su madre creaba en cada lugar para que las costumbres permaneciesen imperturbables. De alguna manera, su cuerpo se movía y su alma permanecía estática, congelada.

Pasar de niño a hombre y seguir siendo 'Chico'

Ahora frecuenta un piso viejo, con lámparas amarillentas, alfombras de imitación y tejados con vistas al parque. Chico nos cuenta su vida. Como en toda buena autobiografía, hay parte real y parte fabulada, y nos presenta a su madre, a su padre, a Lola… Tan solo pretende que el espectador viaje con él y se sumerja en las ciudades en las que vivió pero que apenas conoció, que conecte con sus amigos, con sus obsesiones, con su gran amor. Chico quiere hacernos testigos de un emocionante viaje a un destino desconocido.

Cartel: Cora Carrasco (Piscapez)

Sí, estamos hablando de una obra de teatro, y su nombre no parece muy difícil de adivinar: Chico, interpretada por Daniel Eusse y dirigida por Álvaro Aránguez. Su propio autor califica la historia como “un niño atado a su madre, en permanente lucha contra el miedo, la cobardía, su madre y sí mismo”. “Cree que se rebela, que romperá con todo, amenaza con cambiarlo todo, pero lo cierto es que lo que más quiere es que nada cambie”, explica.

Pasar de niño a hombre y seguir siendo 'Chico'

Hablando de lugares, el laboratorio de creación multicultural Nave 73 (Calle Palos de la Frontera, 5 · Madrid) será el espacio que acoja Chico los miércoles 13, 20 y 27 de enero, a las 20:30 horas. Vuelve a programarlo en su cartelera tras el exito que obtuvo el pasado julio dentro del ciclo Iguales, un programa especial para celebrar la Semana del Orgullo LGTB. Ni la mejor de las excusas sería suficiente para no emprender este maravilloso viaje.