Están siendo días difíciles para la comunidad trans en Reino Unido, después de que el miércoles pasado el Tribunal Supremo reconociese únicamente a las mujeres cis en la definición legal de “mujer”. Una semana después, el portavoz oficial del primer ministro británico, Keir Starmer, ha afirmado que “el Tribunal Supremo ha dejado claro que según la Ley de Igualdad una mujer es una mujer biológica”.
Además, el propio Starmer admitió a la BBC que acoge “la decisión del Tribunal Supremo, que nos ha dado una claridad muy necesaria” y que “para quienes ahora elaborar directrices, es una posición mucho más clara”. En otra entrevista para ITV West Country afirmó que “una mujer es una adulta de sexo femenino, y eso lo ha dejado absolutamente claro el tribunal».
Más allá de las declaraciones del primer ministro, Reino Unido ya ha empezado a conocer las consecuencias de la sentencia del Tribunal Supremo. La policía de transporte británica, encargada de la seguridad en los ferrocarriles y otros medios de transporte público, ha anunciado que, a partir de ahora, las mujeres trans detenidas serán cacheadas desnudas por agentes varones y no por mujeres. Y la ministra de Igualdad, Bridgert Phillipson ha declarado que las personas trans deben usar los baños destinados a “su sexo biológico”.
Desde el partido LGBT+ Lib Dems, denuncian la postura del Gobierno británico y afirman que “han demostrado que el Partido Laborista no es mejor que los republicanos estadounidenses. Deberían sentirse avergonzados”, en un tuit en donde califican la decisión de Phillipson sobre los baños como “monstruosa”.
When he came to office, Keir Starmer promised his government would «tread more lightly» on folks’ lives.
Bridget Phillipson’s announcement that trans folks should use the wrong toilets is monstrous.
It shows Labour to be no better than the US Republicans. They should be ashamed
— LGBT+ Lib Dems 🏳️🌈🏳️⚧️ 🔶 (@LGBTLD) April 22, 2025
En los últimos años, la postura de los laboristas británicos con respecto a los derechos trans ha dado un giro de 180º. En 2020, el partido de Starmer se comprometió a introducir la autodeterminación de género para las personas trans. Sin embargo, cambiaron radicalmente su discurso antes de las elecciones de 2024, cuando el ahora primer ministro apoyó los comentarios tránsfobos de J.K. Rowling.