Con su «ópera pop» –así define él mismo su música–, JJ logró el triunfo para Austria en la reciente –y controvertida– edición del festival de Eurovisión, celebrada en Basilea (Suiza), con la canción Wasted Love. Un mal de amores se la inspiró, y gracias a esa experiencia amarga con un exnovio nació la canción que le ha puesto en el mapa a nivel mundial.
Visitó recientemente Madrid, semanas después de haber copado titulares al declarar que no estaba de acuerdo con que Israel –que casi le arrebata el triunfo– participase en un certamen que defiende la paz, la libertad y la igualdad. Bravo por él, aunque en esta ocasión prefirió mostrarse más cauto al hablar sobre el tema. JJ desea que el foco se ponga en su música, aunque con nosotres, obviamente, habló encantado de sus experiencias dentro de la comunidad LGTBIQ+, de la que siempre se ha mostrado muy orgulloso de formar parte.

Fotos: Pavla Hartmanova
SHANGAY ⇒ ¿Te ha cambiado en algo convertirte en ganador de Eurovisión?
JJ ⇒ No, no me ha cambiado, pero tampoco lo he asimilado aún del todo. Me despierto por la mañana, veo el trofeo y pienso: “Ah, sí, algo pasó” [risas]. Lleva un tiempo asumir que eres el ganador de Eurovisión. Me enorgullece que mi arte haya sido aceptado tal y como es.
SHANGAY ⇒ Por segundo año consecutivo, la canción ganadora no encaja dentro de lo que se considera “canción típica de Eurovisión”. ¿Tuviste en algún momento miedo de que la gente no la entendiera?
JJ ⇒ Esta es música que siempre he querido hacer; tenía claro que este era el camino a seguir. Me ha hecho muy feliz que mi mezcla de pop y ópera haya funcionado tan bien y que se haya recibido de una de forma tan positiva en toda Europa y el resto del mundo. Y seguiré en este camino.
«Me despierto por la mañana, veo el trofeo de Eurovisión y pienso: ‘Ah, sí, algo pasó’. No lo he asimilado del todo»
SHANGAY ⇒ ¿Crees que el gusto eurovisivo está evolucionando y que ya no se da por hecho que una diva que hace dance vaya a triunfar?
JJ ⇒ Sí. Ha cambiado mucho, porque intervienen muchos factores: la puesta en escena, el carisma del artista para encandilar al público… Me alegra que la gente haya ampliado su gusto musical, es algo importante.
SHANGAY ⇒ ¿Cómo recuerdas la experiencia, ya con cierta perspectiva?
JJ ⇒ Fue increíble, me divertí mucho. No paré, pero tuve a mi lado un gran equipo que me cuidó mucho en todo momento. E hice grandes amigos con los que sigo hablando todo el rato: Sissal de Dinamarca, Kyle [Alessandro] de Noruega, Miriana [Conte] de Malta…
SHANGAY ⇒ Kyle y tú formabáis parte del llamado «twink club»…
JJ ⇒ [Risas] Así nos llamaban a los skinny gais, y nos lo apropiamos encantados. Hasta que Miriana nos rebautizó, con ella incluida, los «beauty blenders», y decidimos adoptarlo.
SHANGAY ⇒ Ya sois tres ganadores consecutivos pertenecientes a la comunidad LGTBIQ+: Loreen, Nemo y tú. ¿Qué significa eso para ti?
JJ ⇒ Es muy importante [de cara a la visibilidad]. Porque demuestra que Europa es abierta, aunque tenemos que seguir luchando por nuestros derechos y por una mayor aceptación. Al final, todos somos seres humanos, y debemos amarnos y respetarnos como iguales. Eurovisión es un lugar abierto a todos, y cada cual encuentra allí su comunidad. Es maravilloso que una audencia tan amplia y diversa se una para ver el festival.
SHANGAY ⇒ Es de agradecer que no tuvieses ningún problema en hablar de tu homosexualidad…
JJ ⇒ Ser gay es una parte de mi identidad, y siempre he apostado por la autenticidad. Me presenté orgulloso de ser como soy, que es como deberíamos mostrarnos todos.
«No necesité salir del armario. Me siento muy afortunado de tener una familia tan comprensiva»
SHANGAY ⇒ Nada más ganar, no tuviste problema en declarar que no te parecía bien que Israel participase, dando pie a grandes titulares al respecto. ¿Te generó algún problema hablar así?
JJ ⇒ Las reacciones fueron enormes, porque había un foco mucho mayor sobre mí al haber ganado Eurovisión, por eso quise aprovechar ese momento. Ahora solo quiero pensar en mi futuro profesional y centrarme en lo que mejor se me da, la música.
SHANGAY ⇒ Creciste en Dubái, que no es precisamente un paraíso para las personas de la comunidad. ¿Pasaste miedo allí siendo gay?
JJ ⇒ Tuve una infancia muy feliz, me encantaba Dubái. Mi madre es filipina y mi padre austríaco, así que crecí en un hogar multicultural, y me eduqué en una escuela internacional, con compañeros de orígenes muy diversos. Nunca sentí que tuviera que esconderme.
SHANGAY ⇒ ¿Cuándo saliste del armario?
JJ ⇒ Nunca lo hice de una manera oficial. Mi familia siempre me aceptó como soy, no fue algo que se tuviese que hablar, así que no necesité salir del armario. Me siento muy afortunado de tener una familia tan comprensiva.
SHANGAY ⇒ ¿Supuso un choque cultural volver a Austria?
JJ ⇒ No, porque volvía todos los veranos a ver a mis abuelos. Lo más raro era no ver rascacielos por todas partes, y volver a usar transporte público para moverme, cosas sin importancia. Estoy feliz de haber vuelto a Viena con mi familia, porque amo la ciudad y en estos años he hecho muchísimos amigos nuevos.
SHANGAY ⇒ Sois muy pocos contratenores en el mundo. ¿Ha sido siempre tu voz una bendición para ti?
JJ ⇒ Sí, es un regalo de Dios que me hace sentirme muy afortunado. Somos muy pocos, y cada uno en un lugar del mundo, así que no resulta fácil comunicarnos entre nosotros, hay que hacerlo de forma proactiva. Desde el primer momento me centré en explorar la flexibilidad y los límites de mi voz, con el deseo de desarrollar mi carrera en base a ella. Y lo he logrado.
«Cuando le conté a mi ex que iba a Eurovisión con una canción inspirada en él, me felicitó y me mostró su apoyo»
SHANGAY ⇒ Comenzaste probando suerte en distintos talent shows… ¿Estabas convencido de que se convertirían en la llave a la popularidad?
JJ ⇒ Siempre soñé con ser una estrella pop. Veía Hannah Montana de pequeño con mi hermana y quería ser como ella. Mis primeras experiencias en televisión me ayudaron mucho de cara a Eurovisión, porque funcionaban de manera parecida: pruebas de sonido, ensayos, entrar y salir del escenario… Por eso llegué tan bien preparado al festival.
SHANGAY ⇒ Wasted Love nació de un desamor, ¿verdad?
JJ ⇒ Sí, de una relación que tuve. Di demasiado amor y no recibía nada de vuelta. Por eso decidí titular la canción «amor desperdiciado». Porque malgasté mucho amor y mucho tiempo en él.
SHANGAY ⇒ ¿Le contaste a tu ex que ibas a Eurovisión con una canción inspirada en él?
JJ ⇒ Sí, sí. Me felicitó y me mostró su apoyo. Me dijo que sentía que hubiese tenido que pasar por eso, pero que le alegraba que le hubiese inspirado la canción, que sentí como una sesión de terapia.
SHANGAY ⇒ Nada más ganar, nos enteramos en la rueda de prensa posterior que tienes novio actualmente. ¿Cómo vivió tu triunfo?
JJ ⇒ Muy emocionado. Estaba en el estadio con mi familia. Nos conocemos desde antes de Eurovisión, y siempre me ha apoyado. Además, mi familia le quiere mucho, así que genial. Está muy feliz porque ve lo mucho que me estoy divirtiendo, y pasamos los fines de semana juntos.
SHANGAY ⇒ De adolescente, ¿eran todos tus referentes estrellas del pop?
JJ ⇒ La mayoría. Escuchaba mucho a Kelly Clarkson, Avril Lavigne, Ariana Grande, Mariah Carey. También a dos divas de la ópera que me inspiraron mucho: Maria Callas y Montserrat Caballé. Siempre me han fascinado las voces agudas, sobre todo de sopranos.
«Tenemos que seguir luchando por nuestros derechos y por una mayor aceptación»
SHANGAY ⇒ ¿Quién es para ti la mejor cantante pop ahora mismo?
JJ ⇒ Antes era Mariah Carey, ahora diría que Ariana Grande.
SHANGAY ⇒ ¿Cuándo tuviste conciencia de Conchita Wurst?
JJ ⇒ Cuando vi Eurovisión por primera vez, con mi familia, en 2014. Vivir una victoria histórica como esa para Austria, con 13 años, fue una locura. Haber contado con su apoyo este año ha sido lo mejor del mundo. Que una ganadora de tu país desease tanto mi victoria fue increíble. Me siento muy afortunado de tenerla como amiga. Lo que Conchita logró en su día fue brutal, a pesar de los detractores que surgieron. Su victoria trajo un gran cambio, una mayor aceptación de la comunidad queer y de las artistas drag.
SHANGAY ⇒ ¿Qué mensaje quieres enviar en el mes del Orgullo?
JJ ⇒ Sentíos orgullosos de ser como sois. Cuidaos y cuidad a quienes tenéis cerca, y aseguraros de que todo el mundo se trate con respeto y se ame, que es lo más importante. Vivid cada día con orgullo, porque somos imparables, y sed felices.