Hace ya dos meses que Ariana Grande y el rapero Big Sean acabaron con la relación que tanto habían paseado por alfombras rojas y que dio un par de duetos inolvidables. Pero parece que Grande ya ha pasado página y que, además, está más irreverente que nunca.
En unas imágenes filtradas por TMZ.com (el portal sobre noticias de famosos al que ellos más temen), Ariana se encuentra con un par de amigos y uno de sus bailarines, Ricky Álvarez, dentro de un establecimiento de donuts. Los jóvenes bromean entre ellos y gastan bromas.
Una de ellas es acercarse a los donuts que están en el mostrador y lamerlos cuando la trabajadora del local no está mirando. Justo a continuación de hacerlo, Ricky y Ariana flirtean, y acaban besándose –y no parece que sea para quitarse el azúcar de los labios–.
El vídeo acaba con unas palabras un tanto desagradables de Grande cuando la camarera aparece con una nueva bandeja de dulces. Ariana los mira y a continuación exclama: “¿Qué c*** es esto? Odio a los americanos, odio América”, rematándolo con una mirada de asco hacia el resto de bollería del mostrador y diciendo en alto “esto es asqueroso”.
Un vídeo que no hará ningún bien a la veinteañera, que desde hace ya un tiempo tiene que lidiar con los rumores que apuntan a que es una diva insufrible. ¿Dirá algo la protagonista sobre su nuevo acompañante o sobre el incidente de los donuts? De momento, la pequeña con gran voz guarda silencio.