«Deja tras de sí una obra extraordinaria, tanto como actor como escritor, que seguirá conmoviendo e inspirando a la gente durante muchos años. Pedimos privacidad en estos momentos tan tristes». Así ha anunciado la familia de Terence Stamp, que el actor nos ha dejado este pasado fin de semana a los 87 años.
En más de seis décadas de cine, hemos podido ver al actor británico en películas como Theorema de Pier Paolo Pasolini, Star Wars: La amenaza fantasma y Superman. Aunque uno de sus papeles más reconocidos y queridos siempre será su Bernadette Bassenger, la icónica mujer trans de Las aventuras de Priscilla, reina del desierto.
El actor fue un icono de estilo durante los años 60 y formó una relación mediática con la también actriz Julie Christie. Y aunque no logró encarnar a James Bond tras Sean Connery, brilló en el cine italiano y trabajó con directores como Federico Fellini. Su consagración definitiva llegó con el papel del General Zod en Superman, donde dio vida al villano kryptoniano con una intensidad inolvidable, y con Las aventuras de Priscilla, reina del desierto.
Priscilla… ¿sin una reina?
Justo este año se había anunciado que Stephan Elliot, director de la famosa película LGTBIQ+, estaba preparando una secuela con el reparto original. Para Elliot, es el momento perfecto: «La gente lleva treinta años reclamando esta segunda parte, y ahora que Trump vuelve a estar presente y todo está a punto de estallar es el momento adecuado para hacerlo».
Sin embargo, la noticia del fallecimiento de Stamp, uno de los imprescindibles de la cinta, complicará los avances del guion y la producción que ya estaba en marcha. Y habrá que esperar si la esperada segunda parte seguirá adelante y cómo afrontarán la ausencia del actor.
