Pareciera que el mundo del pop acabara de descubrir el poder de la danza contemporánea. Desde que Sia llamara la atención con su vídeo de Chandelier, con el que conocimos a la bailarina Maddie Ziegler, muchos se han sumado a una tendencia que ya explotaron con anterioridad grupos como Sigur Rós.
La propia Sia repitió la estrategia con Elastic Heart, de nuevo con Ziegler y acompañada en esta ocasión por un semidesnudo Shia LaBeouf. Pero hay más ejemplos, como el vídeo de Hozier en el que David LaChapelle dirige al bailarín ruso Sergei Polunin a ritmo del himno gay Take Me To Church.
El último en apuntarse a la danza contemporánea ha sido el cantautor gay Tom Gloss. El vídeo de su tema Breath & Sound celebra, además, el amor LGTB al incluir tres parejas de bailarines, dos de ellas del mismo sexo.
«No importan los bailares, la danza es siempre la misma, el amor es amor», explica el cantante. «Quiero que la comunidad LGTB sienta que estoy contando su historia. Quiero que se conmuevan, por eso hago esto. No se produce suficiente contenido LGTB. Históricamente, la gente ha sentido miedo de contar estas historias, pero yo no. Siempre usaré mi voz para ayudar a contar las historias de aquellos que no pueden manifestarse».
Y nosotros lo aplaudimos. Te dejamos con el vídeo de Breath & Sound.
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