Los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU pudieron escuchar este lunes 24 de agosto el testimonio de Subhi Nahas, un joven que huyó del Estado Islámico, que quería ejecutarlo por ser homosexual. Nahas se ofreció voluntario para contar en primera persona la situación de la comunidad LGTB en Siria.
Se trata de la primera reunión del consejo en materia de derechos LGTB internacionales, un encuentro que llevaban meses preparando ante la necesidad de afrontar el tema de las ejecuciones a homosexuales perpetradas por el ISIS a lo largo de este año.
Nahas declaró en la reunión que los gays en su ciudad natal de Siria, Idlib, estaban siendo perseguidos y arrojados desde los tejados, incluso algunos apedreados hasta la muerte por ciudadanos, algunos de ellos niños.
“El ISIS está rastreando e investigando para encontrar a los homosexuales que se esconden. Se trata de una caza que acaba con la muerte de los que capturan” asegura Nahas, que confiesa que él tuvo la suerte de escapar a EEUU, donde ahora trabaja para una organización de refugiados.
“En las ejecuciones, cientos de personas del pueblo, incluidos los niños, aplauden con júbilo la muerte de los condenados. No solo es preocupante la matanza que se está produciendo, sino la aprobación que tiene por parte de los ciudadanos y el mal ejemplo que se le inculca a los niños”.
Adnan, un iraquí que participó por conferencia telefónica en la audiencia desde un lugar no revelado en Medio Oriente, aseguró que había sufrido la brutalidad en manos de las fuerzas de seguridad iraquíes, quienes podían haberlo entregado a los yihadistas del ISIS. Un claro testimonio de cómo las propias fuerzas de seguridad del país tampoco respetan los derechos LGTB.
“Los militantes del ISIS se han convertido en auténticos profesionales en lo que respecta al seguimiento de personas homosexuales. Cazan a alguien todas las semanas y luego, a través de sus contactos de teléfono, redes sociales, etc. consiguen nuevas líneas de búsqueda”, asegura Adnan, quien utilizó un nombre falso aterrado por participar en esta reunión.
“Están tratando de localizar a todos los hombres gays y la búsqueda es como un dominó.S si uno es capturado, se abren nuevas líneas para capturar al resto”.
Los yihadistas del ISIS se han atribuido la autoría de al menos 30 ejecuciones por “sodomía” en lo que llevamos de año.
La de la ONU se trata de una reunión histórica en materia LGTB que no será la última, y que pretende atajar las violaciones de los derechos LGTB en el mundo, con especial atención a las ejecuciones del ISIS. La reunión fue organizada por Estados Unidos y Chile.
El evento estaba abierto a todos los estados miembros de las Naciones Unidas, pero países como Angola y Chad se ausentaron. China, Malasia, Nigeria y Rusia enviaron representantes, pero no intervinieron ni quisieron hacer declaraciones sobre lo acontecido en la reunión.
Recordamos que más de 75 de los 193 estados miembros de las Naciones Unidas tienen leyes que, de algún modo, discriminan la homosexualidad.
Adnan aseguró al Consejo que el ISIS se nutre de la homofobia generalizada en Medio Oriente, un ambiente proclive a la discriminación y la persecución de personas LGTB.
“En mi sociedad, ser gay significa la muerte y cuando ISIS mata a los gays, la mayoría de la gente se alegra porque piensan que es algo malo. Con esto ISIS consigue muchos simpatizantes para ganar apoyos” dijo Adnan.
Nahas apeló a los gobiernos a conceder asilo a las minorías sexuales. “No es fácil abandonar tu país y a tus seres queridos”. También aprovechó su intervención para pedir el fin a la guerra en Siria, con la esperanza de regresar a su tierra algún día.
Nahas dijo a los periodistas tras la reunión que “los derechos LGBT no eran una terminología inventada por occidente y que las minorías sexuales de Oriente Medio también sueñan con poseer estas libertades algún día”.