“Sigo soltero porque quiero”. Un tanto atrevida la afirmación de Gabriel, ese actor secundario de Pasión de Gavilanes metido a jugador de béisbol dispuesto a arrasar en Adán y Eva. Ya les adelantamos que no lo conseguirá. Aun así, se puede admirar su bate.
Jugueteos y besos, todos los del mundo. Primero con la “muy sexy” Ana y después con un estereotipo de los de manual de culebrón, Raquel, en el papel de guarrilla pelirroja. Nuestro musculado, que se autodenomina un “hombre completo”, iba a protagonizar un programa muy de su estilo. Eso sí, la estrategia le iba a salir un tanto cara.
Mientras engañaba a una y pretendía pasarlo bien con la otra, el galán napoleónico iba a retrasar su decisión final, con el consiguiente enfado general. Y así pasó: abandono de Raquel y rechazo de Ana en uno de los fracasos más rotundos de esta temporada. ¿Quién es ese hombre… al que nadie ha querido conocer fuera de la isla? Sin verdad no hay paraíso.