Los 10 discos que han marcado este octubre

Temas: Música

JANET – “UNBREAKABLE” – (BLACK DOLL/BMG)

Tras un periodo tenebroso y de reposo, Janet Jackson reaparece cual guerrera serena y templada. Dispuesta a desnudar sus inquietudes, personales y sociales, en su álbum más coherente desde The Velvet Rope –palabras mayores–.

Puede que sea casual, pero lo ha titulado como el tema que abría el último disco de su hermano Michael, Invincible. ¿Qué conexión hay entre ambos? Solo que Janet rinde cuentas de la muerte de su hermano en Broken Hearts Heel, donde por momentos suena como aquel, y donde Jimmy Jam & Terry Lewis han orquestado un brillante homenaje a la era Off The Wall de Michael. Es uno de los contados momentos en que Janet se abandona al baile, porque en Unbreakable priman la reflexión y los tempos reposados. Solo al final de la ‘cara a’ se permite cierto esparcimiento, en Night –aquí el guiño es al Prince de 1999– y en No Sleeep, su única concesión a pensamientos ‘impuros’. 

Es un disco plagado de pequeños detalles que descolocan para bien: ese estornudo en The Great Forever, que rompe con su tono enervado, el subidón trancero de la estupenda Shoulda Known Better... La ‘cara b’ impresiona por su sobria intensidad, que solo rompe la escapista Take Me Away. Lessons Learned, Black Eagle y la gospeliana Well Travelled forman un triunvirato ganador, el mejor retrato de una grande, que no solo no se ha roto por el camino sino que ha vuelto con paso y voz bien firmes, y un disco, por fin, a la altura de su nombre. 
Agustín Gómez Cascales ★★★☆ 1/2

JOHN GRANT – “GREY TICKLES, BLACK PRESSURE” – (BELLA UNION/PIAS IBERIA)

Es una maravilla dejarse desconcertar por este artista que siempre huye de su zona de confort, y no te permite instalarte en la tuya. Este se supone que es su disco de enamorado, pero ¿qué canción dedica a su novio? Una titulada Dissapointing –eso sí, con coros de Tracey Thorn–. Es un álbum poliédrico, con toques de psicodelia, funk bizarro y rock oscuro, aunque sin renunciar a bellas electrobaladas (como la goldfrappiana Geraldine). Poco que ver en espíritu con los anteriores, salvo en su agudeza lírica y extrema sensibilidad. Lo mismo ironiza sobre la (in)cultura gay en Snug Slags que relativiza que sea VIH positivo en el tema que da título a un disco inquietante. A.G.C. ★★★☆ 1/2

SELENA GOMEZ – “REVIVAL” – (INTERSCOPE/UNIVERSAL MUSIC)

Sin ser –de momento– una gran intérprete, lo cierto es que Selena destaca entre todas las de su quinta por la capacidad de engrandecer los buenos temas que le sirven, y hacerlos propios. En Revival parece haberse esforzado especialmente por personalizar su disco. ¿Lo ha logrado? A medias. Pero sí ha conseguido su disco más consistente hasta la fecha, con momentazos como la ya conocida Good For You, Hands To Myself y Me & The Rhythm. Las electropoperas Same Old Love o Sober nos recuerdan que a Selena le sienta mejor –todavía– un pop más limpio y directo. Ella se empeña en hacerse la mayor, pero todavía le queda para firmar un disco adulto. A.G.C. ★★★☆☆

BEBE – “CAMBIO DE PIEL” – (PARLOPHONE/WARNER MUSIC)

Menudo cambio. Bebe se desprende de artificios y dejes que no siempre provocaban empatía y se lanza a corazón abierto a inaugurar nueva etapa artística. La desnudez confesional y la sobria producción de Carlos Jean –que en ocasiones parece haberse inspirado en las de Gonzales para Feist– contribuyen a que luzca una Bebe sorprendentemente emotiva que también comparte una nueva voz. Nunca antes había permitido que el oyente mirara tan dentro, y su desgarro llega, y cómo. Igual que llega su alegría, la de bellezas como Que llueva, que compensan la obviedad de Más que a mi vida. Nada volverá a ser como antes para Bebe. Por suerte. A.G.C. ★★★☆☆

DISCLOSURE – “CARACAL” – (MPR/UNIVERSAL MUSIC)

Qué desangelada resulta la segunda entrega de los hermanos Lawrence, una decepción en toda regla. Ni el envoltorio visual ni los colaboradores ni el sello de la casa contribuyen a hacer de Caracal un disco con excesivos alicientes. Si de por sí Sam Smith agota con su repetición de fórmulas, en Omen se juntan tres dispuestos a ofrecer de nuevo, con otro nombre, lo que tanto impactó hace tres años. Eso es toda una vida hoy día para un artista. Sorprende el escaso rendimiento que se ha sacado a colaboradores como The Weekend, Kwabs y Miguel, que no pueden evitar sonar casi tan desganados como las bases sobre las que cantan. Solo dos apuestas les han salido redondas, las que hacen por Lion Babe y por Lorde, que se lucen en los dos únicos momentos en que damos fe que de que estamos escuchando un disco de Disclosure. Kenny Beat ★★☆☆ 1/2

¿Qué disco tiene la puntuación más alta del mes? ¿Qué diva gay vuelve con un disco sorprendentemente bueno? Pasa página

 

CHVRCHES – “EVERY OPEN EYE” – (VERTIGO/CAPITOL/UNIVERSAL)

Brutal y contagiosa resulta la energía de este disco, que confirma a Chvrches como aspirantes aventajados a llenar estadios en breve. Lo suyo es tecno-pop puramente ochentero hecho por jóvenes que ni vivieron los 80. Lo más interesante es que no solo demuestran aquí lo mucho que beben de los primeros Depeche Mode, también nos hacen ver cómo sonarían The Knife si tuvieran ganas de convertirse en superestrellas masivas. Chvrches parecen querer, y (lo) hacen muy bien. Iván Salcedo ★★★★☆

ALESHA DIXON – “DO IT FOR LOVE” – (PRECIOUS STONE)

Su cuarto álbum se ha hecho de rogar, lo bueno es que es el más completo de su carrera como solista. Se abre con un temazo r’n’b, Stop, que te hace pensar que Mis-Teeq siguen en activo. Y Tallest Girl, más housera, es de sus mejores singles. Le da a todos sus palos habituales, incluido el garage (Count On You) y el discopop petardo (quizá The Way We Are es lo más obvio y prescindible). El momento soul de People Need Love abre nuevas puertas para una Alesha Dixon en plena forma. A.G.C. ★★★☆1/2

 

SWEET CALIFORNIA – “HEAD FOR THE STARS” – (WARNER MUSIC)

Han encontrado la fórmula perfecta y no es de extrañar su éxito. Su nuevo álbum es la confirmación de que son lo más parecido a unas Atomic Kitten que hemos tenido nunca (escucha Just One). Y los featurings de Jake Miller y Benjamin pueden ser la llave a un éxito internacional. Con un disco tan bien hecho, la marca pop España va bien representada. Melanie Trigueros ★★★☆☆

 

 

B.S.O. – “AMY” – (ISLAND/UNIVERSAL MUSIC)

No cabe duda de que el retrato de Amy Winehouse firmado por Asif Kapadia es uno de los documentales más brillantes de este año. Y como ocurre con todas las superestrellas fallecidas que son homenajeadas en cine, se aprovecha para lanzar un disco con el que seguir perpetuando la leyenda. La banda sonora de este gran documental está formado por la música original de Antonio Pinto y rarezas de Winehouse, desde versiones poco conocidas a grabaciones en directo de sus grandes éxitos, utilizadas en la película. Si la has visto, seguro que no podrás resistirte a este lanzamiento, y con razón, porque contiene momentos de gran belleza y una emotividad incuestionable. Gustavo Van Santos ★★★★☆

FAITHLESS – “20” – (CHEEKY RECORDS/SONY MUSIC)

Dos décadas tiene ya el trío comandado en la sombra por Rollo, cuya colección de hits es incontestable. Para celebrar este sonado cumpleaños los vuelven a reunir en un doble volumen perfecto para ilustrar los logros de Faithless, que han creado grandes himnos atemporales, responsables en parte de sentar las bases para la nueva ola progressive que nos azota. Insomnia, God Is A DJ, We Come 1…, son muchos y buenos. Más irregular es la colección de nuevos remixes que se incluye. Los primeros, firmados por luminarias como Avicii, Armin van Buuren, Axwell o Tiësto ofrecen lo que se espera de ellos. La cosa se calienta con los de Claptone o Booka Shade. K.B. ★★★☆☆

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