“Sé que no es un drama y no me supone lágrimas, pero me está pesando”. Con estas palabras, un usuario gay de la red social Reddit nos hacía partícipes de su particular drama: le ha tocado la lotería y no sabe si repartir parte del bote con sus padres homófobos.
En concreto, 15 millones de dólares tienen la culpa. Nuestro protagonista, de 29 años y escondido bajo un pseudónimo traducido como “No me quiero rendir”, salió del armario cuando tenía 15 años. Es sin duda su número mágico. Sabe que no tiene por qué volver a trabajar, pero quiere ser responsable con el dinero.
Y también consecuente. Porque su familia le reclama una cuarta parte del montante, una vez que se han enterado de la cantidad total del premio. Lástima que durante su adolescencia no estuvieran igual de rápidos para aceptar la sexualidad del joven. De hecho, los mismos que ahora le exigen estuvieron cinco años sin dirigirle la palabra, con las consecuencias psicológicas que se pueden imaginar.
“¿Cómo explicarles mis planes y que no están incluidos? ¿Debo contactar con un abogado? El dinero cambia a la gente, no quiero que rompa la relación pero el daño está hecho”, explica el premiado. ¿Y tú, qué harías?