En Marruecos, el artículo 489 del Código Penal castiga con una pena de entre seis meses y tres años de cárcel a “quien cometa un acto impúdico contra natura con un individuo de su mismo sexo”. Eso le añade un valor especial a la declaración homosexualidad de Hajar Mutawakil y su mensaje cargado de valentía.
En un vídeo difundido por la revista gay digital Akaliyat (Minorías) y que ya se ha convertido en un fenómeno viral, nuestra protagonista pide que todo el mundo pueda “expresarse como persona” porque “el amor no es un pecado, no es un crimen, amad a quienes queráis y donde queráis”.
Y el problema no es del musulmán persona, sino de sus creencias que “me denigran primero como persona, segundo como mujer, tercero como no musulmana y por último como homosexual”. Por supuesto, en su país no ha dejado a nadie indiferente. Mutawakil solo pide tolerancia.