Tom of Finland y sus ilustraciones ya tienen sucesor. Y si no bastará dar una vuelta por Japón para ver su última tendencia. El manga homoerótico de chulazos fornidos ha llegado.
Jiraya, un diseñador gráfico nipón, ha decidido adentrarse en la industria del porno gay. Sus creaciones aparecen en situaciones cotidianas pero, casualidades de la vida, siempre con poca ropa. El merchandising derivado de ellas es ya una máquina imparable.
“Estoy muy feliz de descubrir que mis representaciones de ‘guapos asiáticos’ han inculcado en ellos confianza en sí mismos”, cuenta Jiraya en una entrevista. Muy cuidadoso, nunca muestra su rostro, y así solo pueda reconocerse por su arte. Publicaciones como las que abren este texto ya se han entregado, ahora solo queda ver si se expande por Occidente.