La Guardia Civil no permite que una agente lesbiana sea condecorada por su intervención en un grave accidente de tráfico que ocurrió hace unos meses en Galicia, tal y como informa El Ventano.
El pasado 5 de septiembre de 2015, un vehículo que participaba en el Rally de Carral se salió del recorrido y se llevó por delante a más de veinte personas, causando la muerte de siete personas, entre las que se encontraban dos niñas y una mujer embarazada. Uno de los agentes de la Guardia Civil que ayudaron a las víctimas, y cuya labor fue decisiva para evitar un desastre peor, fue Vanesa Fraga, y es por ello que la Federación Gallega de Automovilismo la propuso para recibir una mención especial que le fue concedida, pero que finalmente no se le ha entregado.
El pasado diciembre, Fraga denunció por las redes sociales el supuesto acoso que estaba sufriendo por parte del cuerpo de la Guardia Civil a causa de su condición sexual. Su angustia fue tal que, tras casarse y aumentar la presión de sus compañeros, decidió quitarse la vida con un disparo en el pecho, aunque sobrevivió a las heridas. Tras este suceso, su problemática no mejoró, sino al contrario; según la perjudicada, los altos mandos de la Guardia Civil siguen intentando arruinar su carrera y hacerle pasar por una mala agente.
Los superiores de la agente han conseguido que los organizadores del Rally de Carral retiren la condecoración que iba dirigida a Vanesa por su actuación durante el terrible accidente, para entregársela al general José Feliz Cadenas, que ni siquiera estaba presente aquel día. Sin embargo, en la lista oficial de ganadores de la mención, que se publicó antes de este cambio, aún aparece el nombre de Vanesa.