Pinza para los pezones
Si estás harto de dejarte la lengua y los dientes en estimular los pezones de tu chico, no estaría mal que le dieses una oportunidad a estas pinzas. Siéntete el rey del bricolaje sexual y retuércele las “tuercas” a más no poder.
Pistola de sondeo
Ni en el viejo oeste se desenfundaba pistolas de tal calibre. ¿Aburrido de explorar exclusivamente tu zona anal? Dale un poco de protagonismo a la parte delantera y descubre como estimular tu uretra. Eso sí, no vayas a lo loco, siempre con dulzura y decoro.
El consolador Damien
Algunos lo tachan de provocador, otros de una metáfora sobre el dolor y el sacrificio establecido por la imaginería religiosa a la hora de indagar en nuestro punto G masculino. Juzguen ustedes mismos.
El gancho anal
Mientras la bola de acero se aloja dentro del ano, la cavidad circular oprime los testículos. Una de las mejores formas de “enganchar” a tu amante para que no escape de tus brazos.
Consolador esparcidor anal
Si te has definido como pasivo pero aún no tienes la experiencia suficiente y temes pasar un calvario rectal, aquí tienes una solución para ello. Recuerda siempre utilizarlos con lubricante, preferiblemente de base de agua, ya que algunos están hechos de silicona pura. Es apto para limpiar en el lavavajillas.
Paracaídas testicular
Si te va eso de hacerte el machito delante de tu pareja y eres carne de gym, no dudes en demostrarle cuánto peso pueden aguantar tus partes más nobles.
Dildo Ovipositor
¿Te pone el mundo alienígena? ¿Has soñado con ser la teniente Ripley y ser sodomizada por Alien, el octavo pasajero? Hay gente que sí, que no te extrañe. Por eso este consolador con forma de Ovipositor (tentáculo reproductor de insectos) causa furor entre este tipo de fetichistas.
Dildo doble penetrador
La difalia es una anomalía (para algunos una suerte) genética donde el individuo masculino nace con dos penes. Una fuente de inspiración para este consolador con el que podrás penetrar o ser penetrado doblemente sin la necesidad de hacer ningún trío.
Dildo para fisting
Bien podría ser el brazo de un camarada dispuesto a cantar La Internacional, pero no, no es así. Es el consolador perfecto para aquellos amantes del fisting que no tienen pareja para hacerlo realidad.
Dildo hinchable
¿El tamaño importa? Si pasas de ese debate y eres inconformista acerca del tamaño del pene, aquí tienes tu consolador perfecto. Modifícalo a tu antojo, al estilo asiático o al africano, tú decides.