Italia aprobó ayer, después de varios años de negociaciones y unas últimas semanas de intenso debate político y social, una nueva ley que permite la unión civil entre personas del mismo sexo, además de la posibilidad de adquirir el apellido de la pareja, la ayuda recíproca moral y material, la “pensión de supervivencia” o el permiso de residencia para el cónyuge extranjero. Tres meses después de que la ley fuera aprobada por el Senado, ahora se ha convertido definitivamente en ley del Estado gracias a los 369 votos a favor, 2 abstenciones y tan solo 193 votos en contra en la Cámara de Diputados.
El primer ministro, Matteo Renzi
A pesar de que este derecho ya existe en la mayoría de los países de Europa occidental, la unión civil entre homosexuales será calificada como “formación social específica”, y que se han visto recortadas las medidas que dan acceso a las parejas gays a adoptar hijos, ayer fue un día para festejar, tal y como publicó el primer ministro Matteo Renzi en un post de Facebook: “Hoy es un día de fiesta para muchos, para quien se siente finalmente reconocido, para quien ve que después de tantos años cuenta con derechos civiles”, afirma. “Porque las leyes están hechas para las personas, no para las ideologías, para el que ama, no para quien proclama. Escribimos una nueva página de la Italia que queremos”.
Aunque todavía queda un largo camino por delante, ¡Enhorabuena, Italia!