J.K. Rowling, autora de uno de los mayores éxitos literarios de todos los tiempos, la saga de Harry Potter, recogió un premio el pasado lunes en la gala PEN Literary Awards. En su discurso, la escritora defendió la libertad de expresión del candidato republicano a la Casa Blanca Donald Trump, y contestó a la críticas anti-LGTB que algunos religiosos radicales vertieron contra sus obras.
Rowling aseguró que la libertad de expresión debe estar protegida, a pesar de que algunos la empleen de forma negativa y difamatoria, en referencia a Donald Trump. “Su libertad de expresión protege mi libertad de llamarle fanático”.
La británica, que es conocida por ser una ferviente defensora de los derechos LGTB, comentó la forma en que muchos criticaban y atacaban muchas de sus escritos. “Una vez se me encararon unos cristianos fundamentalistas en un juguetería de Nueva York. No recuerdo muy bien la frase… ‘estoy rezando por ti’, se podía escuchar de forma intimidatoria”, comentaba. “Incluso una vez hubo una amenaza de bomba en una tienda en la que yo me encontraba”.
Sus libros también han sido criticados por el pastor anti gay Kevin Swanson, el cual mandó sentenciar a muerte a todos los gays. El pastor tachó al personaje de Harry Potter como gay y declaró que “América se lamentaba de que Dumbledore, el mentor de Harry Potter fuese homosexual”. En referencia a las palabras de Swanson, Rowling lo tiene muy claro: “Mis críticos están en el derecho de decir que estoy tratando de satanizar a los niños, al igual que yo estoy en el derecho de explicarles que lo único que estoy haciendo es explorar la naturaleza y la moral humanas”.
Rowling también comentó que sus libros están en la lista de los más prohibidos, cosa que no le preocupa en absoluto. “Muchos de mis autores favoritos están en esa lista, y es un placer que me incluyan en ella”.