El asturiano Rodrigo Cuevas es un artista único. Abiertamente gay –bueno, marica, como él prefiere– es un showman en toda regla –bueno, cabaretero, que dice que es un término que le representa más, como folclórica–. Hay que verle en directo para saber realmente qué le hace único. Que lo es.
Cuevas inauguró la actual edición de Inverfest en Madrid con su espectáculo El mundo por montera, en lo que supuso el final de una extensa gira que le ha llevado por toda España, sorprendiendo y hechizando a todos quienes le han visto y disfrutado. Lo suyo es imposible de calificar, porque su arte es radicalmente moderno, «aunque yo vivo en el pasado todo el rato». Y es que Rodrigo lo mismo te canta un cuplé, que te versiona un hit de Tino Casal, que se marca un reguetón o una canción del folclore asturiano. Y lo mismo lo hace luciendo una preciosa falda que en slip y medias, o desnudo directamente. Es imprevisible, y eso le hace fascinante. Aquí le hacemos una serie de preguntas, más o menos indiscretas, según proceda, para que puedas conocerle un poco mejor… y que te quedes con ganas de que estrene nuevo espectáculo para enamorarte de lo que hace como nosotros.