Tras 52 años de relación sentimental, Franco y Gianni, de 83 y 79 años, por fin se han convertido en una pareja civil a ojos de la ley. La ceremonia tuvo lugar el pasado 6 de agosto en la ciudad italiana de Turín, un acto que no ha pasado desapercibido por los medios de comunicación ya que se trata de la primera unión civil gay en la ciudad después de que se aprobara hace tres meses en el Parlamento italiano la ley que legalizaba las uniones civiles entre personas homosexuales.
Los ahora cónyuges ya son una pareja reconocida por el estado italiano, algo totalmente impensable pocos años atrás. “Debéis enseñar a vuestros hijos a no tener miedo. En mis tiempos, si te declarabas homosexual corrías el riesgo de acabar en el manicomio”, declaraba Franco.
El evento fue oficiado por la alcaldesa de la ciudad, Chiara Appendino, que se mostró muy emocionada y orgullosa de ser partícipe de dicha celebración. La pareja estuvo acompañada por 16 invitados, más una multitud de curiosos que se agolparon a las puertas del ayuntamiento, varios medios de comunicación que cubrían el evento, una delegación del Torino Pride y diversas organizaciones LGTB de la región de Piamonte. “Ha sido un camino difícil, hoy no esperábamos estas cámaras de televisión, pero estamos realmente felices”, expresaba uno de los miembros de la pareja.
Aunque la ley fue aprobada por el parlamento italiano el pasado mes de mayo, su aplicacion aún no ha sido llevada a cabo en todos las regiones del país por cuestiones burocráticas. Es por ello que la senadora Mónica Cirinná, propulsora de la ley, autorizó la unión de la pareja de forma urgente mediante un telegrama momentos previos al ‘sí quiero’.
Con esta unión civil, la esperanza del colectivo LGTB italiano de ser reconocido de forma legislativa crece después de que muchos vieran en Italia a un país estancado en lo que a normalización del colectivo LGTB se refiere comparado con otros países europeos.