Jennifer Lopez y Marc Anthony sorprendieron anoche con un reencuentro que nadie esperaba. La ex pareja apareció en el escenario de los Latin Grammy 2016 para cantar una renovada versión del célebre Olvídame y pega la vuelta de Pimpinela, y el momento superó al que ya vivimos los españoles con Chenoa y Bisbal.
Después de cantar juntos de nuevo, con una letra que bien podría desvelar ciertos reproches, la cantante neoyorquina dejó clara la buena relación que mantienen al entregarle el premio a la Persona del Año con unas emotivas palabras. “Hemos aprendido tanto y será muchas cosas en mi vida, mi mentor, mi alma gemela, un padre, y no solo la persona del año… Es una persona de toda la vida”. Aunque la mejor parte, y la más comentada en las redes sociales, es el beso final. ¡Qué bonito!